DEL MIEDO Y SUS CONSECUENCIAS

7 0 0
                                    

A menudo el miedo nos paraliza, nos impide avanzar hacia delante, conseguir lo que ansíamos o expresar un sentimiento. Esta palabra, miedo, es el mayor de los villanos, se camufla en nuestra mente y reaparece aun cuando pensamos que se ha extinguido. ¿Cuántas oportunidades perdidas? ¿Cuántos sueños rotos? Solo por un momento de duda, por la inseguridad que nosotros mismos nos creamos. Y no, no hay que equivocarse, todos somos presas del miedo más irracional en ocasiones. Es eso que sabes que está ahí pero no puedes definirlo, un presentimiento de que lo que puede salir mal saldrá de las peores formas posibles. Una esperanza perdida. Una parálisis auto inducida. Porque eso es lo que hace el miedo, nos paraliza, nos impide continuar, hablar, pensar.
Recordemos de pequeños, ¿cuántos tenían miedo a la oscuridad? ¿Cuántos temían al monstruo del armario o al silencio de la noche?
Pero no debemos caer rendidos a los pies de este sentimiento, debemos luchar y superar nuestros miedos. Poco a poco, no me refiero a que saltéis desde un barranco en tiro linda ni nada por el estilo.
En el amor, el miedo puede ser fatal, en cuestión de segundos una relación puede terminar por el miedo y las dudas. Porque realmente lo que tememos cuando estamos en una relación es a quedarnos solos, a perder a esa persona tan especial y por ende a sufrir por amor. Yo misma tengo ese miedo, pero lo peor que se puede hacer en estos casos es creérselo. Simplemente debemos aprender a relajarnos, confiar en nuestra pareja y dejar que sea el tiempo el que aclare nuestro futuro y no dejarnos guiar por las películas que se monta nuestra propia mente.
Conclusión, luchemos por vencer nuestros temores más profundos, luchemos por ser felices y lograr nuestros sueños. Besitos querid@s lectores.

Mi Columna Literaria(pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora