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-Vamos Niall, aparece. -estaba desesperado caminando en círculos a aproximadamente dos cuadras de la escuela. Hice que el rubio prometiera entrar conmigo a ella y el maldito no aparece.

-¡Harry! -como si lo hubiese invocado apareció con la respiración cortada.

-¿Dónde estabas? -pregunté y él pusó sus manos en sus rodillas tratando de a calmarse.

-Se descompuso el despertador, lo siento Harry. -por la forma en la que me miraba se veía que estaba diciendo la verdad, además era Niall Horan. Imposible odiarlo.

Bufé.

-Bien, vayamos de una vez por todas. -le sonreí dándole a entender que no había problema.

Asintió y ambos nos dirigimos a nuestro destino en pasos lentos, ninguno dijo nada. Quizá ambos pensábamos lo mismo, ¿qué pasaría si alguien tomó mi diario? A mi mente llegaron varias suposiciones de lo que podría pasar, puede que hayan impreso las páginas y haberlas pegado por toda la escuela u quien lo encontró piensa sobornarme con algo para guardar silencio sobre lo que descubrió y la verdad no tenía ni idea de qué pasaría, a veces las personas suelen ser tan crueles. Buscando hasta la más mínima oportunidad para dañar a alguien. Y como no aprovechar está, gran título de chismes. Chico solitario gusta de uno de los jugadores del equipo de fútbol.

Sin darme cuenta llegamos a la entrada y nos detuvimos un momento, Niall seguía sin decir nada y era algo que realmente agradecía.

Ahora no fue él quien buscó mi mano para tener protección, sino que fui yo. El rubio gustoso acepto a mi mano apretándola y regalándome una de sus tiernas sonrisas.

Suspiré y jalé al rubio conmigo.

Fue sorprendente, nadie estaba mirándome ni burlándose de mí. La esperanza de que nadie haya encontrado mi baúl de secretos creció.

-Te dije que todo estaría bien Harry. -se puso de puntillas y besó mi mejilla provocando una sonrisa en mi rostro.

-Siempre tan inteligente Ni. -lo volví a jalar pero esta vez hasta el salón de clase para poder dejar las mochilas.

-Pero no me creíste. -negó con la cabeza.

-Lo siento Ni, desde ahora creeré todo lo que digas. -avancé más rápido queriendo llegar por mi diario ya.

Durante el resto del trayecto seguimos en el mismo silencio pero en realidad era un silencio que disfrutaba mucho.

Abrí la puerta sin ver las personas dentro del lugar. Sólo me acerqué a mi lugar y Niall al suyo. Iba a agacharme por mi diario pero algo me detuvo.

-Em...¿Harry? -me paralice. Sabía perfectamente el nombre de la persona dueña de esa voz pero Dios, creo que estoy soñando o imaginando cosas. Esto es imposible.

-Uhm. -levanté la mirada y ahí estaba Louis frente a mi, luciendo tan lindo como siempre. ¿Enserio me hablaba a mi? ¿Es esto acaso un sueño? Porque si lo es no quiero que nadie me despierte nunca.

-Quería saber si tienes algo que hacer esta tarde. -¿seguros que me hablaba a mí? Porque casi se me paraba el corazón.

-Eh no ¿por qué? -no ahora malditos nervios.

-Perfecto. Es que quería saber qué te parecía si ibamos al partido de hoy. ¿Aceptas? Yo invito.

Mi mente colapso, ¿enserio Louis Tomlinson me estaba diciendo a mí, Harry Styles si quería salir con él? Que alguien me pellizque por favor que sigo sin poder creérmelo.

Tanto tiempo gustando de Louis y cuando me propongo querer dejarlo atrás él aparece pidiéndome una cita, porque es una cita ¿verdad?

No me di cuenta que estuve callado durante lo que fue probablemente un minuto.

Canciones para Louis. [Larry Stylinson]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora