Por generaciones ardió el fuego de los dientes podridos y el aliento a muerte dentro de la boca de un hombre que le besaba la frente a su hija. Él dijo "Perdón", pero todavía no lo sabía.
***
La niña mira al hombre. El hombre mira a la señora. La señora mira al infinito.
La niña baila. Canta. La niña se mueve detrás del hombre. La niña grita. La niña dice "Ayuda".
El hombre mira a la señora. La señora mira al infinito.La señora cae al suelo.
El hombre mira al suelo. La niña se acuesta a descansar.El hombre mira a la niña dormir.
Cuando la niña despierta, lo ve mirándola por un breve momento.La niña dice "Ayuda".
El hombre llora.
El hombre voltea hacia el infinito, donde imagina la silueta de la señora.
La niña ya no baila y ya no canta. Ella da un paso hacia adelante y toma la mano del hombre.
El hombre voltea y se arrodilla. Él la mira a los ojos, por primera vez.
La niña besa su frente. La niña dice "Ayuda".