El bolígrafo de Pan golpeaba la mesa de una forma impaciente. Mordía su labio nerviosa a la vez que sus ojos permanecían inmóviles sobre la puerta del laboratorio. Ni siquiera había sido capaz de prestar atención a los planos que Bulma le había pedido repasar. Llevaba casi todo el día allí, ahora, casi al atardecer, sabía que era cuestión de tiempo que Trunks cruzara en algún momento aquella puerta.
Su corazón latía tan fuerte bajo su pecho. Aquello era un error. Ella no debía estar allí. Trunks y ella habían echo un gran esfuerzo al separase y lo habían echo con la única intención de no hacerse más daño. Por ellos, por sus familias, por sus amigos. Por ellos mismos.
"Todo pasara, olvidaremos lo ocurrido, algún día todo volverá a ser como antes"
Casi deseaba que las palabras de Trunks fueran ciertas y saber que su dañado corazón acabaría curando sus heridas. Pero eso no pasaría. Ella jamás podría olvidarle. Pero por su propio bien y por el de todos, fingiría.
- Pan, ¿te encuentras bien?
- ¿Que?- Diverle apartando la vista de la puerta para mirar a Aoshi que estaba frente a ella, vestida con una bata blanca y con una bandeja llena de piezas extrañas en sus manos.- Si, si.
- Te gustara trabajar aquí, ya lo verás. – Le dijo ella con una sonrisa para animarla.
- Claro.- Dijo volviendo la atención a sus planos.
Aoshi suspiro melancólica y volvió a su trabajo.
Pan imito sus suspiro e intento concentrarse en los planos para no preocupar más a Aoshi.
Pero entonces la puerta del laboratorio se abrió, captando la atención de las dos mujeres. Quienes vieron a una sonriente Bulma entrar en el laboratorio.
- ¿Porque no lo dejan por hoy? Bra esta arriba preparando palomitas.- Dijo Bulma divertida. – Ya habéis echo suficiente. Al final acabare aburriéndome si me hacen todo el trabajo.
- Gracias Bulma.- Dijo Pan levantándose de la mesa.
- Si, gracias.- Dijo Aoshi dejando también lo que estaba haciendo.
- Va, va, estáis de vacaciones vayan a divertirse un poco.-
En pocos minutos ella y Aoshi caminaban por el pasillo que comunicaba el laboratorio de la casa. Ambas en silencio.
- ¿Temes verle? ¿es eso?- Le pregunto Aoshi casi en un susurro.
Pan la miro y simplemente se dedico a sonreír. Pero entonces, al volver la vista al frente, sus pies y su corazón, se detuvieron a la vez.
Trunks, vestido con unos pantalones negros y una camiseta negra, estaba frente a ella, mirándole, seguramente con la misma expresión de sorpresa que debía expresar su rostro en aquellos momentos, a escasos dos metros.
Finge, finge, finge.
- Hola Trunks.- Dijo Aoshi al fin rompiendo el incomodo silencio.
Trunks, aun atónito de lo que sus ojos veían, se vio obligado a apartar la mirada de Pan para mirar a Aoshi.
- Hola.- Le contesto.
- Pan trabajara ahora conmigo.- Dijo ella en un intento de romper el hielo.- Es su castigo por haber suspendido ciencias.
Trunks volvió a mirarla al escuchar aquello. Pan parecía petrificada. No después de todo lo que habían pasado.
- Vaya Pan, como es posible que hayas suspendido ciencias?- Le pregunto con total naturalidad.
Pan alzo la vista para mirarle sorprendida. ¿Él estaba fingiendo? ¿O realmente la había olvidado ya?
- No lo se.- Dijo ella intentando comportarse con naturalidad.-
- Gohan tiene que estar muy enfadado.-
- Si... Lo esta.- Dijo ella.
- Así que vas a trabajar aquí durante las vacaciones de Navidad?
- Si, así es. Mi padre me ha obligado.
- Debes estar contenta Aoshi.- Le dijo él.
- Si, la verdad es que si.- Dijo llevándose la mano a la cabeza.
- Bueno, tengo que...irme.- Le dijo él.
- Cl... claro.- Dijo Pan.
- Nos vemos por aquí.-
- Si.- contesto Pan
Trunks siguió su camino y al hacerlo, paso a escasos centímetros de ella, provocando que su corazón se acelerara inevitablemente. Por unos segundos pudo sentirle nuevamente, su olor, su presencia...
- Pan...- Dijo Aoshi.
Pan la miro.
- Gracias Aoshi.-
Aoshi le sonrió ante aquello.
- Vamos, Bra tiene que estar esperándonos.-
Bra, Aoshi y ella pasaron el resto de la tarde viendo una película. Aunque Pan no logro prestarle demasiada atención.
¿Iban a ser así todos sus días? Cruzarse con él en el pasillo y ¿fingir que nada había pasado?
- Voy a por más jugo, ¿quieren algo?- Pregunto Pan levantándose del sillón.
- No, gracias.- Dijo Aoshi.
- No.- Le dijo Bra perdida en la película.
Pan camino hasta la cocina pensativa y al entrar sus pies se detuvieron de nuevo.
Trunks estaba allí, sentado en la mesa de la cocina, revisando un montón de papeles. Ambos se miraron, pero Pan intento ignorarlo encaminándose a la nevera.
Él la estaba mirando. Podía sentir sus ojos fijamente sobre su espalda, provocándole una cálida y a la vez incomoda sensación.
- Lo siento.- Dijo Pan al fin volviéndose a mirarle.- Intente negarme, pero...
- No tiene importancia.- Le contesto Trunks.
Tras aquello nuevamente se hizo un largo silencio entre ellos. Toda una eternidad que desolaba sus corazón.
- Me alegro de volver a verte.- Le dijo al fin Trunks.- Te he echado de menos.-
- Y yo.- Le dijo ella.
- Vamos... vamos a tener que acostumbrarnos... a vernos.-
- Si.- Dijo ella con una sonrisa melancólica.
- Si... si tu estas bien... a mi...a mi me esta bien.-
- Esto... si claro... todo esta bien.- Mintió ella.
- Bien.- Dijo él dedicándole una sonrisa.
Pan le devolvió la sonrisa y sin más se volvió para coger su zumo y salir de la cocina antes de que su corazón decidiera salirse de su pecho.
