Cap. 2

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En medio de mi sueños donde Lucas, está bailando conmigo en el baile de San Valentín, demasiado cerca de mi cara, demasiado cerca de mis labios...

Me despierta mi precioso y para nada estúpido despertador; despertador, que acaba destruido en el suelo.

Me visto perezosamente y desayuno al igual que los caníbales, hambrienta.

Me despido de mi abuela con un beso y de mi hermano, de 10 años, revolviéndole el pelo.

Llego al colegio y me encuentro con Marc e Isabel, desafortunadamente no me toca con ellos en la siguiente clase.

Entro en el aula y veo que solo hay un sitio libre y es al lado de...¡Lucas!

Me siento a su lado, nos saludamos con un simple "hola"....¡no se que decir!

Después de lo que paso el viernes...

Empieza la clase de Matemáticas, extrañamente el profesor hoy solo le limita a dar lecciones.

Noto como Lucas no para de mirarme y como cada vez que le miro de reojo el agacha rápidamente la cabeza; ¿y si en verdad la carta era para mi?

Se acaba la clase; he de admitir que estaba un poco triste al sonar la campana ya que quería pasar más tiempo al lado de aquel chico...

<< ¡¿Pero que me está pasando?! ¡Yo no soy así!, y todo por culpa de la maldita carta>>

Cuando acabamos la clase me encontré con Marc e Isabel en el pasillo y, como no, estaban abrazados.

-Vamos tortolitos, que aun nos quedaremos sin comida- Digo mientras los tres nos vamos entre risas.

Llegamos a la puerta de la cafetería y pienso que ya es hora de que hable con Lucas sobre la carta.

<< Vale, estoy preparada para esto >>

Intento convencerme a mí misma.

Abro la puerta de esta y me encuentro con un millón de estudiantes ansiosos por comer. Pero yo solo me fijo en una mesa, la mesa de los "populares"; gobernado por Anabelle Clark, una exótica inglesa rubia "natural" de ojos verdes y por Simon Rodriguez, capitán y mejor jugador de todo el pueblo, pelo azabache y ojos azules con tez blanca; todo un Don Juan.

Pero en esa mesa está sentado Lucas... que ahora me mira fijamente, diablos esto va a ser más difícil de lo que yo creía. Y ahora, ¿Cómo me acerco ahí sin ser parte de burlas?

Parece ser que hoy es mi día de suerte porque Lucas se acerca a mi, bueno no, en verdad se acerca a tirar la comida sobrante ya que tengo la basura al lado; que asco.

-Oh, Hola Clara- Me dice con su sonrisa de hoyuelos.

-Hola Lucas- le digo yo sonriéndole de la misma forma- Oye, quería hablar contigo un momento, te... ¿te importaría salir fuera un momento?

-Claro- Me dice el un poco intrigado.

Al salir ya hacia fuera y asegurarme de que nadie nos oiga – si, aquí son todos muy cotillas y cualquier nueva pareja es una historia jugosa- empiezo ha hablar sin poder evadir los tartamudeos del nerviosismo... Dios mio, ¿Desde cuando soy así de tonta?

- Emm... esto, y-yo quería hablarte so-sobre la semana p-pasada- pare y respire hondo, preparándome internamente para lo que me venía- La semana pasada me llego una carta de amor, justo una declaración y bueno... ponía que era tuya y...

-Espera, espera, espera. ¿Una carta? Esa carta iba dirigida a otra persona no hacia a ti... lo siento mucho Clara, tan solo te veo como una de mis amigas- Me interrumpió, y eso para mi fue como un balde de agua realmente helada y no sabia que hacer o decir ya que estaba... en shock. –Emm... ¿Clara? ¿Estás bien?

-¿Ah? Si, si. Siento el malentendido, tienes razón en ningún momento decía que iba hacia a mi asi que... lo siento. Amigos- Estiro mi mano en señal de vergüenza, arrepentimiento y trato de amistad. El me da la mano y pactamos el "amigos" en un total silencio en nuestras mentes.- Eh... Bueno adiós.

-Adiós Clara.- Se despide Lucas, y es notorio por su expresión que también siente vergüenza por el GRAN malentendido y culpa, por ver que yo había creído que esa carta iba hacia a mi.

De repente, mi apetito había desaparecido y solo tenía unas ganas tremendas de irme al baño, adentrarme a un cubículo y llorar desconsoladamente.

Pero no, solo llegué a desparramar una sola lágrima que elimine al segundo. Yo ya me dije de que habían muchas posibilidades de que no fuera hacia a mi; pero las sonrisas, las miradas, el hablar conmigo, me metió ilusiones falsas en la cabeza, imaginaciones que me llegué a crear.

No se de donde cogí la valentía, pero agarré papel y bolígrafo y empecé a escribir:

Lucas, he sido una tonta al pensar que tu carta podía ser para mí,.. Yo ya sabía que no debía ilusionarme por una tontería, pero al final, al hablarme y ser tan amable conmigo, me convencí a mi misma de lo que no debía.

Se despide, esta chica que está escribiendo en un patético baño.

Clara Soriano

P.D.: "Te quiero" como amigo.

Al acabar de escribir ni siquiera revisé las faltas de ortografía ya que si no, se que me acobardaría y, esa carta nunca llegaría a su destinatario.

Voy a paso rápido entre los pasillos; esquivando a gente y pidiendo perdón.

Me paro enfrente de la taquilla de Lucas y meto la pequeña carta por las alargadas rejillas y por si las moscas, me agacho y hago como si me atara la zapatilla... que no tiene cordón.

<<Eres una genia Clara>> Me dice sarcásticamente mi subconciente.

P.D.: Te amo {CANCELADA}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora