Me desperté y me duche. Me puse la ropa (MULTIMEDIA) y fui a desayunar.
-Hombreee! Que pronto!- dice Emma cuando entro en la cocina-¿Qué tal ayer con Cameron?-al oír su nombre se me formó una sonrisa de oreja a oreja.
-Bien -dije sin más y borre mi sonrisa.
-Esta muy bueno eeh-dice mientras me guiña el ojo.
-Ay Em!
-Ahora me dirás que no...-dice rodando los ojos y las dos reimos.
Bajó Clarie somnoliento-hola chicas.
-Buenos días- dijimos Emma y yo a la vez.
-¿Cómo dormiste?- pregunté.
-Bastante bien, aunque si os digo la verdad me quedaría todo el día tirada en la cama- me respondió.
-Al igual yo- dije. Desayunamos y nos fuimos. Llegamos y cada una se fue con sus respectivos amigos.
-Effy!!- me gritó Ana.
-Hey!-grité de vuelta.
-Buenos días señorita Dallas- me dijo Hayes, a lo que yo me sonrroje.
-Cameron nos contó a los chicos y a mi. ¿Qué le hiciste?- me volvió a decir.
-¿Cómo?- preguntamos Ana y yo a la vez.
-Esta rayadísimo! Dice que eres demasiado pequeña pero que ayer cuando estuvo contigo se lo paso como con ninguna otra.
-¿¡QUÉ!?- volvimos a gritar Ana y yo a la vez.
-Nosotros nos quedamos igual.
-Tan solo hablamos y el hacía chistes. Nada más lo juro- dije.
-Buaaaah tía lo tienes!- me dijo Ana.
-¿¡Qué dices loca!?- grité.
-Por cierto- volvió a decir Hayes -mi hermano vendrá a recogerme, si queréis os llevamos.
-claro!- dijimos Ana y yo. La campana sono y entramos a clase.•NARRA CAMERON•
Me quedé en casa de Nash a dormir. Me llevaba muy bien con sus padres asique... yo no podía parar de pensar en Effy, ¿qué me esta pasando?, ¿por qué pienso en ella? Es tan sólo una niña debería fijarme en chicas de mi edad. He estado hablando con Nash y me ha dicho que si me gusta que la conozca mejor, que la edad no importa. El la conoce muy bien y dice que es super maja, estoy deseando que sean las cinco para poder ver sus preciosos ojos y esa sonrisa cada vez que le digo alguna bobada. Es tan... PEQUEÑA!! Que rabia... ¿No podría a ver nacido antes?•NARRA EFFY•
Llevo todo el día pensando en Cameron. Se lo he dicho a Hayes y me ha dicho que es un poco raro porque le conozco de un día, pero que si al final resulta que me gusta que haga lo que yo de verdad quiera. No se ha enfadado pero me quiere y se preocupa por mi. Las clases ya han acabado y estoy de camino a casa con mi hermana, al final he decidido ir andando en vez de ir con Hayes en el coche con su hermano.
-Oye, ¿qué tal ayer la clase?- me preguntó.
-Bien, aburrida ya sabes...-
-Ahh...-
Llegamos a casa y aun quedaban 2 horas para las cinco. Comí y me eché un rato en mi cama para dormir. Desperté por el sonido de mi móvil, la alarma. Eran las las 16:55 p.m. Baje a la sala para colocar las cosas. A los 10 minutos llamaron a la puerta.