Un Golpe De Amor

#4 Un cambio inesperado

Emily:

Al despertar me sentía cansada, como si no hubiera dormido en años.

Escuché a mi madre discutir por teléfono y bajé a ver que sucedía.

-¿mamá?-mi madre se limpió las lágrimas y me sonrió-¿que sucede?

-voy atrasada con el pago de tu matrícula... No tenemos el dinero suficiente y no hay vecas

-ah...-no podía ponerme triste, necesitaba que ella estuviera feliz-si quieres puedo comenzar a trabajar-sugiero pero ella niega con la cabeza. -no te preocupes mamá, hay más universidades e incluso mejores... ¡ya sé! Hay una a tres cuadras de aquí, dicen que es muy buena y dan vecas-digo, realmente no sabía si era buena, pero sí sabía que daban vecas.

-¿segura?-asiento con mi cabeza

-si ya no puedo ir a la otra universidad hoy podremos ver si esta de al lado me acepta, vamos a alistarnos... Debemos recoger las cosas de mi universidad actual.-a decir verdad yo no quería pasarme de universidad, pero entendía a la perfección la situación en la que nos encontrábamos.

Me alisté y me coloqué un vestido azul rey, me puse unos zapatos bajos negros y me retoqué las ojeras con un poco de maquillaje, deliniando mis ojos azules.

Fuimos primero con mi madre a mi universidad, me dieron mis cosas y mi madre me desmatriculó de ella, para luego ir a lo que será a lo mejor mi nueva universidad.

Al llegar todos estaban entrando, fue algo más fácil de lo que esperaba.

-¿en que les puedo ayudar?-dice una señora de unos 29 o 32 años.

-¿dan vecas?-pregunto

-verá, mi hija Emily necesita una veca por que en la universidad en la que se encontraba no tenemos como pagar el monto de dinero, venimos con la esperanza de que aquí mi hija pueda estudiar.

-si, claro... ¿podemos hablar usted y yo?-mi madre me dice que vaya a darme una vuelta y veo los jardines que eran bastante más grandes que los de mi universidad anterior.

(...)

Me encontré nuevamente con mi madre y fuimos a casa, comenzaría al día siguiente mis clases ya que iba algo retrasada por que el curso ya había iniciado.

En el auto no había mucha conversación hasta la casa, decidí ponerme un jeans y una camiseta blanca con un dibujo que decía "love music" y mis converse blancos.

Salí al parque y me senté a leer, no había mucha gente... Pero si había tres o cuatro parejas de enamorados... Una de ellas tenía niños y me puse a pensar... ¿podré algún día tener esa hermosa oportunidad de ser madre? Mi vista se fue a la cancha de baloncesto que estaba vacía y eso me entristeció de algún modo, pero había un balón, al principio dudé un poco pero luego me levanté y tomé el balón dejando mi libro de lado, comencé a apuntar y lancé, pero fue el fracaso más fracasado. Era pésima para los deportes y nunca había jugado baloncesto... Pero yo tengo orgullo, debía encestar al menos una de todos mis fracasos.

Me preparé a lanzar y volví a fracasar.

-una vez más-susurro para mi misma y me vuelvo a preparar a lanzar y sentí dos manos en mi cintura elevándome, el olor de esa colonia... ¡Era el olor de la colonia Invictus! Mi impulso ya estaba así que lancé una vez más y logré encestar, cuando me colocó en el piso nuevamente y con cuidado me volteé a ver y terminé muy cerca de él, levanté mi vista de su pecho y vi a Andrew con una sonrisa sensual de lado... Se veía tan sexy... La lluvia comenzó a caer fuertemente empapándonos en segundos, él suspira en una risa sarcástica

-siempre nos vemos cuando llueve en grande-susurra con voz ronca dejándome embombada en sus ojos castaños claros... Él era perfecto... Eh... Es decir... No... Claro que no.

Le sonrío de lado

-¡es tu culpa! Yo estaba de lo más feliz seca y tu vienes con la fría lluvia-dije abrazándome a mi misma con una sonrisa, Andrew me abraza y yo me paralizo

-entonces dejame abrazarte y así puedo darte calor-me sonrojo y lo aparto, agarro mi libro y salgo corriendo con el corazón latiendo a mil por segundo.