Capítulo 3.

996 33 2
                                    

Narra Harry.

*Al día siguiente*

Norah no me había vuelto a llamar, mi locura empezaba a brotar cuando alguien me sacó de mis pensamientos negativos.

-Harry, dime qué te pasa-soltó Liam.

-Estoy bien.

-No, dime qué te pasa-repitió el moreno de ojos oscuros.

-Es Norah-suspiré.

-¿Qué le pasa? No me digas que está...

-Sí, ¿QUÉ? No está embarazada Liam, ojalá fuera eso-respondí.

-No entiendo nada pues-se rindió.

-Ayer cuando llegué a casa por la noche no estaba, me dejó una nota-la saqué de mi bolsillo y se la tendí no quería volver a leerla aunque ya lo hubiera hecho miles de veces.

Liam leyó la nota en silencio. Sus ojos se habrían cada vez más a paso que transcurría su lectura sobre aquel papel ya arrugado. Nos encontramos en la habitación de 'relax' de una emisora de radio. Agradecí que estubieramos solos.

-Harry yo, no sé que...

-Ayer me llamó un número desconocido. Juraría que escuché su voz pidiendo ayuda. No quiero llamar por si está en peligro pero quiero salvarla. Esto es tan contradictorio, hubiera sido mejor que hubiera muerto aquel día en el parque en vez de Josh.

-No digas tonterías Harry, te ayudaré a buscar a Norah. Todo saldrá bien, te lo prometo-y me abrazó.

-Liam, es mi vida entera. No puedo perderla. No quiero perderla. 

Narra Norah.

Fui imbécil al llamar a Harry ayer, debería no haberlo hecho así pensaría que estaría muerta y hubiera sido más fácil para todos.

-Eh guapa, ¿estás cómoda?-soltó el hombre.

Se acercó a mi y me acarició la mejilla, le escupí. No podía hacer nada más, estaba atada de pies y manos literalmente.

-¿Por qué me tenéis viva? Yo maté al idiota de vuestro amigo, haced lo mismo conmigo-solté sollozando.

-Porque eres demasiado guapa como para morir. Además, tienes una cosa que nosotros no: Un novio rico dispuesto a pagar lo que sea por ti-sonrió falsamente otro hombre un poco más jóven que el primero.

-Si quieres te mataremos, pero delante de él y después de que nos hayas hecho unos favorcillos-contestó el primero-Por cierto, me llamo Jack, te lo digo para que te acostumbres al nombre. Lo chillarás mucho esta noche en la cama.

Me entraron ganas de vomitar. Y no me corté, le vomité encima a uno de ellos. al que estaba sentado enfrente mío vigilándome.

-Qué asco, por dios-se quejó.

-Necesito ir al baño. Por favor-fingí hacerme la mareada.

-Vamos, llévala. 

Me soltó y me cogió de las muñecas con sus grandes manos. Me guió hasta el lavabo.

-¿Vas a entrar conmigo también o qué?-solté borde.

Me soltó y cerró la puerta detrás de mi. Objetivo cumplido. Ahora tenía que buscar algo para poder hacerme el suficiente daño como para no volver a este loco mundo.

My heart is so tired |Segunda Temporada|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora