Como diga, Señorita [proyecto abandonado]

Parte 1: ¿ te conozco ?

Mi nombre es Lucas Dávila, tengo 18 años y recién me mude a mi nuevo departamento. Mis padres me ayudaron a moverme de una casa en las afueras de la ciudad, al centro de la capital. Pronto estaré empezando la universidad, siguiendo la carrera de traductor de idioma español-ingles, como también "por si acaso" la carrera de profesor de educación física para luego ser entrenador de gimnasio. Desde pequeño, mi cuerpo fue bastante atractivo, lo cual me funciono a mi favor, pero no atrajo a las chicas de mi gusto. Ahora, a unos días de comenzar mis estudios, estoy en forma para que la ropa que use, se me vea muy bien.

-primer día de la universidad-

Guau, todo es nuevo para mi, la gente y los profesores, ojalá haga algún buen amigo con quien salir y compartir ratos. De la nada, creo ver a alguien muy familiar, no será la chica que conocí hace unos años?, no, no lo creo...no puede ser ella.... 
-¿se te ofrece algo, chico?- me pregunta con una voz tan suave y linda, que no puedo evitar sonreír levemente.
-disculpa, te conozco? - En el fondo se que si, pero mi memoria no registra nombre ni sitio en que la haya visto.
-no lo se, no tienes alguna cara familiar, pero igual me presentare. Mi nombre es Luz, Luz Reyes. Un gusto...- me mira, esperando alguna señal de quien soy.
- ah si, Lucas, Lucas Dávila -conteste torpemente.
- un gusto Lucas Dávila. -contesta mientras mira el mapa de la universidad para ver cual era el salón de su clase.
En mi cabeza, no podía dejar de pensar en su voz y su mirada, unos ojos verde claro que derretían a quien miraba, su pelo castaño claro, liso y con perfume de jazmines y unas curvas muy lindas, aunque su personalidad un misterio.
- ¿que haces? ¿Podes quitar esa mirada de pendejo por favor? - reacciono rápido y salgo de mis ilusiones. Quede como un completo idiota, y ella lo sabe. Gran presentación la mía...
- dis..Disculpa, no era mi intencion... - una voz me interrumpe, no puede ser, será que?
- Luquiiii !!! - viene una chica corriendo hacia mi, saltando sobre mi espalda y abrazandome como un hermano. Si, definitivamente era ella, Camila. En lo que ella se dispuso a sorprenderme, la hermosa chica Luz se había alejado, dejándome con la intriga de conocerla mejor.
- Luquii !! Tanto tiempo !! Como has estado ? Veo que te viniste a vivir acá !! Contáme de vos !! No sabes cuanto te extrañe !! - comenzaba la sesión de preguntas de Cami...algo me dice que este día sera muy largo.

-salida de la Universidad. 4:30pm-

   Al fin termina mi hora de clases, para ser el primer día ya nos tienen trabajos de investigación y libros que conseguir. Esto de ser traductor de ingles-español es un asunto algo complicado, no porque sea ingles, sino por los libros que debo comprar y las investigaciones de dichos idiomas que tengo que hacer. Cami ah prometido ayudarme con las tareas, ya que ella estudiara la misma carrera, y arreglamos vivir en el mismo departamento.
- así que traductor de ingles/español eh? nada mal para un chico como vos, suponía que querrías ser entrenador o algo así.- dice Luz, mientras me doy la vuelta para ver sus hermosos ojos y figura.
-si, bueno...traductor es lo principal, por si acaso también estudiare profesorado de educación física, para luego ser entrenador de gimnasio.
- era de suponerse...ese cuerpito tuyo es raro para mi en un traductor.- sentía como si algo insinuara, como si quisiera sacar algo de mi que no logro entender.
- ¿a que te referís? ¿acaso hay algo que no te guste? - la miro algo confundido y enojado
- solo sentía curiosidad...no es necesario demostrar tu macho interno todo el tiempo, sabes? -dice mientras se empieza a alejar de mi- solo quería saber de vos, machito... -
- jm...esta bien...nos vemos Luz.- sin tener una respuesta mejor, esas palabras frías se me escapan y ella se va.
Nuevamente actuando como idiota, acabo de perder un rato con ella y hasta quizás una salida. ¿ Por que siempre tenemos que ponernos estúpidos frente a una chica?. Mientras caminaba con Cami a casa, las palabras de luz no paraban de resonar en mi cabeza: "chico....machito...cuerpito....", quería saber que ocultaba tras esas palabras, pero el tiempo que tarde en volver a la realidad ya estaba adentro de mi nuevo departamento, junto con Cami.
- luqui luqui luqui...nunca cambias verdad? -mirando las pesas y demás elementos de gimnasio.
-si lo hiciera, no tendría el físico de siempre Cami- riendo suavemente mientras ella empieza a acomodar algunas fotos y demás decoraciones.
-sabes...siempre me pregunte como eran esos heladitos que tenes bajo tu remera..-dice imitando una voz sensual- ¿ me dejarías verlos? -
-claro...como usted desee señorita..-siguiéndole el juego de voces sensuales. 
 empiezo a levantar mi remera, mientras que ella se mordía su labio inferior, poniéndome algo colorado por su acción.
- ¿ que sucede? acaso le gana una chica ? -su voz sensual se vuelve mas atrevida que otra cosa.
- oh cállate -bajando mi remera y desesperándola
- ¡¡ dale luqui !! ahora no me dejes con la intriga !! -dice quejándose.
- yo se que a la noche me vas a levantar la remera para verlos, así que espera- riéndome de su actitud infantil.
Luego de haber echo mas de la mitad de mis investigaciones, decido ir a dormir. Cami ya estaba durmiéndose sobre mi hombro, así que decidí hacerle upa y llevarla a mi cama, ya que la suya aun no la traía. Luego de moverla, la acomode, y prepare el sillón en el cual me dispuse a dormir. Entre vuelta y vuelta, encontré mi mejor posición y los sueños invadieron mi cabeza, haciendo que duerma como un bebé.

~~shadow~~