ahora me toca a mi

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Salí de mi habitación dirigiéndome a la puerta, paso por el living ya que la puerta se encuentra en esa dirección y todos me quedan mirando como si estuviera por una pasarela luciendo mi atuendo que hace que me vea sexy. Mire a Alexa por última vez, con esos ojos llenos de amor, ella se encontraba sentada al lado de Peter Luther el chico afortunado. les faltaba poco para estar tomados de las manos. Chico tonto.

Iba camino a la fiesta que sería en la misma escuela, ambientada para la fiesta, con globos, mesas redondas, escenario, pista de baile. Todo sería espectacular.

Llegué y todos me saludaban la chicas me miraban de pie a cabeza y al saludarme me daban un beso en los labios ¿Pueden creerlo? Que mejor. Iba directo al bar y me senté

- una cerveza

- Hola john- miro a mi lado y era la pelirroja, me la devoré con la mirada, hasta ella lo noto, usaba un vestido muy corto incluso alcanzaba a ver sus calzones y el escote era en v, tenía buena vista de su enorme busto.

-hola- me tomé el vaso al seco, al terminarlo pase mi lengua por mis labios pidiendo mas- otra- la pelirroja se acerca mucho a mi que rozaban nuestras piernas y prendió fuego dentro mi, ella mordia su labio inferior.

- sabes quiero decirte sobre lo del cappucino, fue muy grosero...- estampé mis labios en los suyos, agarré su cabeza y la apreté más contra la mía para seguir besándonos, al parecer se veía fascinada así que seguí luego introdujo su lengua en mi boca y estaban descontroladas jugueteando una con la otra. Estábamos tan juntos que sentía su enorme busto en mi pecho y tenía ganas de más pero me interrumpieron y se me fueron las ganas de tener sexo. Creo que solo son excusas.

- aquí tiene- volví a beber la cerveza de un trago, y está vez pedí un vodka

-oye- me habla la pelirroja mientras me entregaban el vaso de vodka en mis manos. me sentía algo mareado y estaba perdiendo el control- que te parece si nos vamos a otro lado- insinúa una de las salas de clase. Me levanté del asiento, bebí el vodka y respondí

- ya pasó- volteo y me dirijo a la pista de baile donde se encontraban todos bailando, saltaban otros se manoseaban y besában. Esto debí hacer hace mucho no debería estar esperando a una chica que no me quiere.

-Hola bebé- volteo y era lisa, Elisa no me acuerdo de su nombre, toma mi cuello y me acerca hacia ella, nuestras narices rozaban, sentía su perfume drogandome la abrace y puse mis manos en sus caderas mientras bailabamos- me gustas john- susurró en mi oído- Bajé más mis manos hasta llegar a su enorme y formado trasero, lo manoseaba y lo apretaba dándole placer. Sus labios arrazaron contra los míos, nos besábamos alocadamente como si el mundo se acabaría ahora. La tomé en brazos y me la llevé al baño todo lo hacíamos sin parar de besarnos, la senté en el lavamanos y ella comenzó a sacarse el vestido por arriba, y quedaron al descubierto sus sostenes pequeños. Me acerqué y comencé a besar su cuello haciendo un caminito hasta llegar a sus labios y devorarlos de nuevo, todo iba perfecto hasta que por mi mente pasó la imagen de Alexa. Me separé de esta chica y la bajé del lavamanos.

- lo siento, no puedo

-¿ Por qué, si estás soltero?- dijo mirándome con picardía

-soy virgen- sin pensarlo lo dije, puse mi mano en su cara cerca de los labios tratando quitar el labial corrido. Mientras se abrochaba el vestido, Yo estaba odiandome por no haber terminado esto, ¿ Es lo que cualquier chico quisiera o no?.

Salimos y regresamos a la fiesta. Volví a ir al bar caminaba para todos lados y mis ojos daban vueltas y vueltas.

-dame un vodka por favor- lo tomé y acomodé mi cabeza en la mesa. Bebí toda la noche y no se que habrá pasado porque no recuerdo nada más.

Amanecí en el bar y vi que quedaban muy pocos chicos tirados sobre las mesas. Desperté con un enorme dolor de cabeza que me hacia poner de mal humor. Fui al baño, lave mi cara y partí rumbo a la casa de los ricos. Por lo borracho que estaba me perdí de varias cosas, una de esas eran las premiaciones, las palabras honorables de mis compañeros. Todo. Aunque Tengo que admitir que tuve una noche fantástica, con dos chicas, no me acuerdo si me metí con otra, no está nada de eso guardado en mi memoria. Mire la hora y eran las dos de la tarde, además tenía nueve llamadas perdidas de mi madre.

Llegué a casa y me recibió mi madre.

-iugh, estas pasado a alcohol, date una ducha- besó mi frente y me acompañó hasta el baño. Dejó ropa colgada lista para ponerme. Me Di una ducha y fue una de las más refrescantes que he tomado en toda mi corta vida.

Me dirigí a la cocina, a tomar agua

- ¿Dónde están todos?- pregunte a mi madre

- fueron a jugar golf, están todos contentos con ese tal chico peter- con que eso era, deben estar todos felices golpeando la pelota pero eso no me importa, aunque estoy celoso Porque Alexa lo está disfrutando.

-¿Es el novio de Alexa?- pregunto sin mirar a mamá

-el anoche pidió su mano- mi corazón se detuvo, sentí mi corazón crujir, mis manos temblaban y tragué saliva con gran dificultad.

Mierda. Lo que me faltaba.

-supongo que ella dijo que si

- hoy le dirá la respuesta, a la hora de almuerzo.

Sólo tengo que prepararme para la respuesta de Alexa, se que es seguro que le dará un puto si. Caminaba por todos los lados de la casa, recorría cada rincón pensando en como quitarme de la cabeza a esa chica. Estaba muy inquieto, realmente no puedo hacer nada. Ese chico tiene más ventajas que yo. No creo poder ganarle, el la enamoró en un instante o puede ser que por eso Alexa no me daba chance, porque estaba con ese peter, ahora lo entiendo todo. ¡Mierda! Que tonto fui, ella debió reírse todo este tiempo en mis espaldas con él.

Sé Que Me QuieresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora