Siempre serás tú

Capítulo 1 (II)

CAPÍTULO 1

Narra Andy

Joder que susto me ha metido el muchacho. Si es que mi madre siempre lleva gente y nunca me avisa. Aunque creo que lo he asustado más yo con mi grito de Psicosis.

Me pongo un chándal viejo y me seco el pelo rápido. Cuando ya estoy, decido acercarme a la habitación del recién llegado. Llamo a la puerta, lo que él no ha hecho antes, y me espero a que abra.

-Perdón por lo de antes -le digo, intentando no rememorar el escenario-. Pero hay una acción que se dice: Llamar a la puerta -le remarco.

-No pasa nada -contesta él con tranquilidad-. Ya, pero pensaba que no había nadie -pues no has pensado muy bien, pienso.

Estoy decidida a marcharme cuando recuerdo que no me he presentado.

-Por cierto, yo soy Andy. Un placer, Kyle -le digo, intentando sacar toda la poca simpatía que hay en mí.

Bajo hasta el comedor y me siento en el sofá al lado de Jack, mi hermano menor, a mirar la televisión.

Mi madre viene con nosotros y nos cuenta:

-Hace muy pocos días que Kyle perdió a su abuelo, espero que tratáis con cuidado. Además, parece un chico simpático.

Esto dices tú mama, tú no sabes que a abierto la puerta cuando yo me estaba a punto de duchar.

-¿Cuánto tiempo pasará aquí, mamá? -pregunta Jack.

-Indefinidamente, cariño.

Yo reprimo un suspiro. Cuando ella dice: indefinidamente, quiere decir que no sabe nada, sólo lo que le ha dicho en el centro.

Mientras espero que mamá nos llame para ir a la mesa, cojo el móvil y me pongo a hablar con Sophie, mi mejor amiga.

Andy: Soph! Tengo otro infiltrado en casa.

Sophie: Infiltrado... ¿y este como es?

Andy: Pues, por extraño que te parezca, es un año mayor que nosotras.

Sophie: Y qué, ¿está bueno?

Miro el mensaje con confusión. No sé qué contestarle, no la he visto tan bien. Además, yo no soy de las que se fija en eso...

Pero antes de que pueda responder cualquier cosa, en Kyle baja las escaleras y se queda plantado delante de la cocina.

-Kyle, siéntate a ver la televisión con ellos.

Kyle le hace caso a mi madre y se sienta en el sofá cercano al de mi hermano. Yo lo miro de reojo y veo que está bastante tranquilo, después de todo lo que nos ha explicado la mama que le ha pasado.

-Chicos, a cenar.

Nos levantamos los tres a la vez y vamos hasta la mesa del comedor, que ya está parada y con la comida en la mesa.

Cuando estamos todos sentados y empezamos a comer, mi madre empieza a explicar todos los planes que tenemos que hacer mañana:

-De acuerdo. Andy, tú irás a comprar el material que te haga falta para el instituto. Jack, te vendrá a buscar a las diez la madre de Gordon para ir al partido de hockey. Y tú, Kyle, vendrás conmigo para comprar los libros del instituto. ¿Os parece bien?

Los tres asentimos y mi madre sigue hablando, como de costumbre, de todas las cosas que le pasan.

Me doy cuenta que en Kyle la escucha con toda atención. Sonríe cuando le hace gracia algo, pone cara de confusión cuando no entiende algo, gira la cabeza en señal de asentimiento cuando está de acuerdo con lo que dice. Es el primer chico que viene a casa que intenta integrarse y lo consigue con tanta facilidad.

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Foto de portada: Andy