t r e i n t a y u n o.

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Esta mañana no me sentía con ánimos. Creo que mi periodo estaba cerca y bueno, no quería hablar con nadie.

Gracias al cielo era viernes.

― Oye, Emma ―dijo Freddy colocándose frente a mí― ¿me ayudas con mi proyecto?

Hice un mohín. ― Si quieres ―me encogí de hombros.

― Ay, Emma ―exclamó Freddy― te estás volviendo bien mala onda.

¿Qué?

― Tal vez ya lo era y nunca lo demostré ―me encogí de hombros ignorando su comentario.

― Estoy de acuerdo con Freddy ―agregó Jos.

¿Gracias?

― ¿Vas a querer que te ayude o no? ―dije un poco agresiva.

Al final Freddy accedió a que lo ayudara y bueno, no lo hice con los mejores ánimos del mundo.

La clase de metodología se pasó más lenta de lo normal, lo cual no me gustó para nada.

― Niños, necesito que rieguen las plantas ―dijo la profesora de ecología entrando al salón.

Todos fuimos a llenar las cubetas.

Yo me quedé con Alan esperando a que su cubeta se llenara por completo. Bryan y Meli se habían ido juntos, y Jos estaba con Alonso. En cuanto a Freddy, bueno, él estaba haciendo...nada. La verdad no estaba haciendo nada, solo estaba mandando mensajes o al menos eso parecía.

― No es cierto ―soltó Alan.

― ¿Qué? ―fruncí el ceño.

― No te estas volviendo mala onda ―sonrió.

― Gracias, Alan ―lo abrace.

Alan sonrió y luego lo acompañé a regar las plantas.

Mientras Alan echaba el agua, yo solo lo observaba hacerlo.

― ¿Te gustan las películas de Disney? ―dije mientras daba vueltas sobre mi propio eje.

― Sí ―contestó y una sonrisa se formó  en mi rostro.

Después de regar las plantas, nos regresamos al salón.

Estuve platicando y cantando junto a Alan canciones de Camp Rock, High School Musical y alguna que otra en español.

Jos estaba muy raro conmigo. Intentaba hacerle plática pero el se resistía y me ignoraba o solo se portaba un poco cortante conmigo.

Ese tipo de actitud me disgustaba mucho.

Un día me tomaba la mano y al otro era una completa extraña. Daría todo o casi todo, por saber que rayos pasaba por la mente de Jos.

A la hora del receso me acerqué con Bryan. Meli estaba por algún lugar de la escuela y yo agradecía eso. Me daría oportunidad de hablar con su novio acerca de Jos.

― ¿Qué te dice Jos? ―dijo.

― No mucho, no me ha hablado.

― ¿De verdad te gusta mucho? ―lo miré y asentí― sólo no me salgas con que te gusta porque tiene dinero.

¡Pues quien me cree!

― Por supuesto que no Bryan, me ofendes ―lo miré mal.

― Por qué por ahí escuché que Pao si es así ―giré los ojos.

― ¡Estás hablando de Pao! ―exclamé― no soy como ella. Me conoces.

― Eso si ―sonrió.

¡Hey, Jos! (Versión extendida) |Jos Canela| [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora