Capítulo V - La Fuerza de la Sangre

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                                  Febrero Ocho

Hace cuatro veranos que en mi vida algo cambio

Cuando febrero era ocho mi noche ilumino

La vi y extraño me sentía como olvidarlo

De sus manos tan pequeñas mi sonrisa tan grande


Me paso lo que a muchos en la vida nos pasa

Esperaba un llanto varonil esa es la verdad

Aprendí a quererla aprendí a extrañarla

Ella crecía y yo crecía con ella sin querer


Es difícil ser juez y sentirse culpable a la vez

Como negarme a esa mirada que mía es

Como no recordarme cuando triste la veo

Somos tan iguales somos tan sensibles


Nunca imagine hacer lo que por ella hice

es fácil ser padre lo difícil es ser papá

Me siento cursi a veces pero ella lo vale

Me siento niño a veces pero ella grande me hace


Los tiempos han cambiado pero igual nos aíslan

Tenemos tan pocos derechos como agua desierta

Quizás pocos somos a los que si nos importan

Mientras más vuelves más te alejan de ellos


Aunque el tiempo pasa lento a tu lado sigo

Tu inocencia quiso mi guerra llenarla de paz

Te quiero futuro te quiero presente

Te quiero mejor que yo y más que tu


                              Infancia

Mi niñez fue tan pequeña como lo bueno que pase

Recuerdo millones de lágrimas y un solo te quiero

Vi la cobardía y el abuso y aprender de ella no quise

Viví el infierno en la tierra y el cielo en mis sueños


Cuanto afectarnos puede ser niños sin sonrisa

Cuanto afectarnos puede hoy que grandes somos

Viví en un circo sin carpa y de lavadas caretas

Ella la sufrida el su calvario nosotros sus excusas


La separación no es el fin del mundo a veces es mejor

Sufren menos los hijos cuando más daño les haces

El pañuelo seca las lágrimas pero las penas no cura

Decidí cambiar la historia y no hacer lo que me hicieron


Lo más cómodo es la cadena seguir yo lo he escuchado

Mis padres fueron así conmigo yo seré así con mis hijos

¿Qué culpa tiene el presente de nuestro pasado

Quiero ser justo y recordar lo bueno que extraño


Infantiles adivinanzas es recordar tardes con ella

Cuentos en la noche es recordar lo bueno que él tenía

Extraño la tradición que en estos tiempos hemos perdido

Me gusta la cercanía hoy somos más amigos que padres.


No juzgo a mis padres no me siento quien para hacerlo

Hoy entiendo que todo pasa por algo y para algo mejor

Mi moraleja no es para los que fueron sino para los que serán

Las heridas huellas dejan caminemos sobre ellas caminemos



                 Mis Dos Latidos

Decirte que te quiero es poco

Quererte cuando te amo es mucho

Decirte que infinito te amo

Porque los años no recuerdan olvido.


Decirte que el honor que me haz dado

No hay dinero que pueda comprarlo

Decirte hoy que a la niña vas dejando

Que siempre recuerdes estos 12 años


Decirte mi Princesa de Nubes

Que mi Madre te adoraría

Te cantaría aquellas canciones

Y se que nunca la olvidarías.


Decirte que si en el cielo un día

Una Rosa de tus ojos sonrisa

Es la imagen de mi Madre

Que junto a Dios tus pasos caminan.



Poemas sin versos- Jaime AntonioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora