Como Llamar A Aquello

A todo se le ha asignado un nombre, por lo cual, deberíamos llamarlo de ese modo, y yo no puedo llamar amiga a la que me apuñala por la espalda, ni puedo llamar diversión a un estado de ánimo débil, por lo consecuente, no puedo llamar amor a aquello que teníamos tu y yo, podría llamarlo.... joder, ¿y como lo llamo? Si me importabas como nadie pero mejor nada serio. Lo que si puedo es ser explícita y quizás vosotros halleis la respuesta a mi pregunta en cuanto lo que eramos.
Lo recuerdo como si hubiera ocurrido ayer, tenia sus dos manos pegadas en mis tetas, me quitaba el sujetador en el siguiente paso, y me los lamia hasta el punto en el que se le dormía la lengua, yo, con aquel grado de excitacion simplemente quería todo y sin pensar en nada, ya lo pensaría en otro momento, en cualquier otra circunstancia.
Al escribir siento en mis oído todavía su respiración cada vez más y más agitada, pensaba que le daría un infarto si esa respiración seguía con aquel ritmo, pero no, todo lo contrario, era como darle más volumen a tu equipo de música, me iban a sangrar los oídos, pero joder, también me sangraba el clitoris d

e tanto chuparlo y de eso no hice queja, era el amante todo poderoso, creador de mis fantasías más ocultas y de mis orgasmos más gritados, y hablando de gritos, mil veces después de... bueno, quizás sea un poco fuerte que escriba eso, pero... ¿y porque no? ¿Porque tanto tabú sobre el sexo? Si tengo claro que es lo único bueno y bueno de verdad que nos ha dado esta vida. Pues como iba diciendo, hablando de gritos, cuantisimas veces le tuve que tapar la boca... mis vecinos creerían que se trataba de un crimen más de tres veces al día, como mojaba mis bragas cada vez que lo escuchaba gritar porque me comía toda su moustrosidad, y si, lo llamo así porque pedazo de bicho, no entiendo todavía como era capaz de meterlo en mi boca de aquella manera sin terminar por ahogarme, pero en fin, tampoco entiendo porque todos los meses me llegan 30 euros más en la factura del móvil y todavía no he ido a poner una reclamación.
Joder... es solo acordarme y...  me encantaba comérsela, lamersela, mirarle a los ojos mientras se la chupaba, él ya no sabia donde mirar, le faltaban lugares en el mundo para perder sus pupilas medio verdes medio blancas por algún sitio, ya no tenían color sus ojos, era vernos y ponersenos completamente blancos, ¿quien disfrutaba más ahí? Si cuando el me metía los seis dedos, cinco de una mano y el pulgar de la otra yo me estremecía pero cuando yo le hacía ese "movimiento de caderas que me vuelve loco" el gemia y gemia, llegue a pensar que pensaba en como hacerlo para que cada día me entrasen más ganas de ir hasta su casa, desnudarme y luego decirle "follame, pero esta vez quiero tener que coger el autobús porque no quiero poder ni andar" madre mía, una vez, dos, tres, SIETE. Pensaba que el cansancio llegaría en algún momento, pero que va, se trataba de ninfamanía por parte de ambos o quizás más de tratar de tragar, porque que agusto me tragaba su puto semen y ahora que alguien me diga, después de todo eso, el me abrazaba, me miraba a los ojos cuando los suyos ya habían recuperado el color de origen t me decía "me encantas" ¿como llamar a aquello? Si yo sentía lo mismo, pero yo tenía largas alas, más que su polla, simpre me gustó volar libre.