•090

6.1K 193 67
                                    

Narra Danielle

Desde que llegamos a la playa todo a ido a la perfección.

Al principio me ponía celosa cuando cachaba a Justin viendo a otras mujeres.

Pero después me puse a pensar que no tiene caso, ya que puede mirarles todo lo que quiera, o yo puedo mirar a otros hombres, pero al final se que ambos nos amamos con mucha intensidad.

Y no lo demostramos a cada rato, somos adictos al sexo.

En cuanto llegamos lo hicimos en el hotel, luego yo quise cumplir una fantasía, así que nos metimos por la ventana a un cuarto ajeno y lo hicimos ahí.

De nuevo con la adrenalina y la presión de que podían descubrirnos, lo cual era excitante.

Me llevó a cenar, conocimos a una pareja aquí Alejandro y Sara, unos chicos de nuestra edad.

El 4to día cumplimos la fantasía de Justin, consistía en hacerlo en la arena.

Comenzamos bien, a un ritmo rápido, yo estaba tomando el control así que subía y bajaba mis caderas mientras el tenía sus manos en mi trasero.

Tratamos de controlar nuestros gemidos pero se nos fue imposible por lo que alguien nos escuchó y tuvimos que salir corriendo de ahí.

(*)

Ya era nuestro último día en la playa, estábamos un poco desanimados por lo mismo, el único impedimento para quedarnos era la universidad.

Estábamos en temporada de exámenes.... no podíamos darnos el lujo de faltar.

Así que disfrutamos ese día al máximo.

Nos levantamos a eso de las 12:00 pm, desayunamos, y nos dispusimos a bajar a la playa para asolearnos un poco.

Después fuimos a la piscina y ahí nos encontramos a nuestros nuevos amigos Alex y Sara, ellos también se irían mañana.

Lo malo es que no viven en el país, así que no los podremos frecuentar, quizá no los volvamos a ver.

Fui a hacer unas pequeñas compras con Sara, Justin me dijo que fuera con ella porque el me tenia una sorpresa.

Compre unos recuerdos para mi familia, la de Justin y para Alexis.

Sara compro ropa y zapatos, bastantes diría yo.

(*)

Daban las 10:00 pm y yo me había terminado de arreglar hace 30 minutos pero Justin no me dejaba salir del baño.

Cuando por fin salí me encontré con una pequeña mesa para dos, velas en el cuarto, vino, una cena y un ramo de rosas amarillas sostenidas por Justin.

El cual llevaba un traje, lo amaba ahora aún más con traje.

-- ¡demonios! Te ves increíblemente sexy y caliente.- mi pulso se aceleró y mi parte baja palpitaba

-- Digo lo mismo de ti.- tomó mi mano e hizo que diera una vuelta y silbó.-- mira que bellas piernas y tu lindo trasero, tus curvas son perfectas, eres como una guitarra, ya tienes un nuevo apodo: mi guitarrita

-- Veamos, ángel, gatita y guitarrita, suenan perfectos cuando tu los dices.- le quité el ramo y olí las flores.- son muy lindas y huelen a ti.- las puse en agua y me acerqué a besarlo, mis brazos rodearon su cuello y lentamente pase mi lengua por detrás de su oreja, exactamente por su tatuaje: 🎵

-- espera.- gimió.- aún no, hay que cenar

-- no tengo hambre.- hice un puchero

-- si si tienes además te enseñaré algo nuevo además de otra posición.- me guiño un ojo y sonreí

Nos sentamos e iba a comenzar a comer la carne.... pero me detuve cuando vi los cubiertos.

-- Te enseñaré a usar los cubiertos, a tomar vino en copas, a... saber que hacer en un restaurante o con invitados.... o en mi casa con mi mama.- mis ojos se cristalizaron

Jamás un chico se había tomado la molestia de enseñarme algo.

No me ofendí como alguna otra chica lo haría, de hecho se me hizo un gesto muy lindo de su parte.

(*)

Durante la cena Justin me enseñó todo lo que se hace y lo que no.

Se desespero un par de veces pero suspiraba y se relajaba.

Terminamos de cenar y ansiosos por llegar a esta parte nos besamos. Y tocamos por todas partes.

Nuestros cuerpos estaban totalmente pegados. Su lengua jugueteaba con la mía.

Sus manos estaban en mi cintura y las deslizaba por mi espalda mientras bajaba el zipper de mi vestido.

Quitó mi vestido y quede en ropa interior, hizo que diera una vuelta.

-- jamás me cansaré de decir lo perfecta que eres

Volvimos a besarnos, quité su corbata, luego su saco y por ultimo desabotoné su camisa.

Pasé mis manos por su pecho, espalda y brazos.... tenia la piel más suave del mundo.

El se deshizo de sus pantalones y quedo en bóxers.

Deslizó sus manos desde mi cintura hasta mis bragas y comenzó a masajear mi clitoris por encima.

Entre nuestros besos gemía y empezaba a sudar y excitarme.

Quitó mis bragas e hizo lo mismo, sus cálidos dedos recorrían mis adentros.

Desesperada por tenerlo dentro, lo empuje a la cama baje sus bóxers, los avente a algún lado de la habitación y me hundí en su miembro.

Movía mis caderas en círculos, desabrochó mi brasiere y con ambas manos tocaba mis pechos.

Cambiamos de posición... una nueva posición.

Yo estaba debajo de el, tomó mi pierna derecha y la puso sobre su hombro.

Lo que hacía que hubiera mayor profundidad. Y porsupuesto mayor placer.

Arquee mi espalda y puse los ojos en blanco, definitivamente esto era el paraíso.

Nos corrimos y nos quedamos acostados, Justin nos tapó con las sábanas.

Después de varios minutos ambos seguiamos despiertos y comenzamos a platicar hasta quedarnos dormidos.


❌Ya se acerca el gran final, que nervios❌

WhatsApp •JB +18 EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora