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Capítulo 31

Narra Danielle

-- ¿Felices?.- pregunté sonriendo a Dylan y a Kate, ambos asintieron felices

Todos estábamos encantados de volver a nuestras antigüas vidas.

La mudanza había terminado de traer casi todo, esta vez quise conservar algunos muebles, que eran pequeños y no estorbaban en la casa.

Justin entró a la sala donde me encontraba admirando la casa, la extrañaba como nunca.

-- Ahora la casa se siente viva.- tomó mis manos y se sentó a mi lado.-- cuando no estaban hasta la veía oscura, sin chiste y con lo de mi mamá.- su cara cambio de feliz a triste.- hablando de ella, hoy es su misa, de 6 meses, ¿podrías ir conmigo?.- preguntó con sus ojos llorosos

Lo abracé por unos cuantos minutos, se veía tan triste e indefenso, que hasta a mi me dieron ganas de llorar.

-- claro que iré contigo mi amor, solo que, no llevare a los niños, creo que aún están muy pequeños para eso... tal vez más adelante.- el asintió y se limpio las lágrimas

(*)

Después de unas horas me di un baño y me vestí para ir a la misa, encargue a mis nenes con Alexis.

Y de ahí nos fuimos Justin y yo a la iglesia.

Luego a la casa de Jeremy a acompañarlos un rato, aunque Pattie jamás fue de mi agrado, de alguna manera extraño sus indirectas.

La muerte no se la deseo a nadie, y apesar de todo, siempre estaré muy agradecida con ella por haberle dado la vida a mi mundo entero.

Ahora supe lo que provocó el paro cardíaco de Pattie.... Jazzy le comento que estaba embarazada. Pero ninguno la culpan de su muerte.

Jaxon, Justin y Jeremy también se enojaron con ella, pero se relajaron porque ya no podían hacer nada.

El bebé ya estaba creciendo y lo único que les quedaba era resignarse y poco a poco ir aceptando al bebé y a Freddy, el novio de Jazzy y papá del bebé. (PARA LAS QUE NO RECUERDEN FREDDY ES EL NIÑO CON EL QUÉ JAZZY SE TOMA UNA FOTO AÑOS ATRÁS, QUE ERA NUEVO EN SU VECINDARIO)

Después de las 10:00 pm regresamos a casa, aún sin recoger a los niños, ya nos habíamos reconciliado en mi antigüa casa pero no nos fue suficiente.

Ya que en cuanto subimos al auto, Justin no dejaba de tocar mis piernas, y de vez en cuando las subía hasta mi entrepierna.

Mi corazón palpitaba rápido junto con mi sexo.

De solo imaginarme lo que me esperaba en cuanto cruzaramos la puerta de entrada me mojaba.

Abrió Justin e iba a caminar a la sala pero el me detuvo jalando un poco mi brazo.

Quedamos frente a frente. Paso mi cabello por detrás de la oreja y acarició mi mentón.

-- No sabes lo que te espera gatita.- susurró en mi oído para luego besar mi cuello

Nos empezamos a besar, su lengua entró en mi boca y la saboree con la mía.

Me cargó haciendo que enrede sus piernas, y yo estaba tan desesperada por tenerlo dentro que intenté bajar sus pantalones para introducir su pene en mi, seria fácil ya que yo traía vestido.