Desperté con un dolor de cabeza horrible, y peor, a las 8:35 de la mañana. No soy de despertar temprano, Yuya si pero yo no puedo, y si, vivimos juntas. Salí de la cama y camine hasta la puerta para después salirme de mi habitación. Fui hasta la cocina y abrí el refrigerador, saque mayonesa, jamon y lo necesario para hacerme un sandwich, y en ese momento entró mi hermana.
-¡Buenos diasssss!-beso mi mejilla.
-Hola.-dije apagandamente.
-¿Qué tienes?-me pregunto tomando una manzana.
- Me duele la cabeza horrible.-me talle las sienes.
-Te dije que no era bueno tomar café en la noche.-se rió.
-Fichis me obligó.-me excuse.
-Hablando de Fichis, te tengo una noticia.-me miró sospechosamente.
-A ver, cuéntame.- le dije mientras comía.
-Queremos ir a Los Ángeles, así todos, ósea me refiero a los colombianos, serían Sebastián Villalobos, también Arango, Juana, Juan, Mario Ruiz, Paisa, también creo que irá Juanpa, queremos que vaya Andy pero el aún va a la escuela, irá Rix, Juca, y no se, ¿qué dices?-me pregunto.
-Pues, si. Me hace falta salir.-sonreí.
-Nos vamos pasado mañana.-me sonrió, se dio la vuelta y se fue.
-¿Qué? ¡Yuya!-le grite.- ¡Ya lo tenían planeado!-me reí.
Se encogió de hombros y se rió de mi mientras caminaba hacia el pequeño gym que teníamos en nuestra casa. Subí a mi habitación, tome mis toallas y mi celular, entre al baño, puse música, me despoje de mi ropa y me dispuse a darme una ducha. Una vez que termine salí del baño y me seque. Me vestí con unos jeans rasgados por las piernas, un pequeño top, me coloque una chaqueta encimay para terminar mis vans blancas y baje, me encontré a Yuya grabando.
-Voy a casa de Fichis.- le avise mientras tomaba mi mochila.
-Esta bien, te veo al rato.- Me sonrió.
Salí de la casa y comencé a caminar, la casa de Fichis no estaba lejos, eran unas 15 o 10 cuadras y eso no es mucho. Me hice unos 20 minutos caminando hasta que llegue al edificio de Fichis, subí por las escaleras y toque la puerta.
-Hermana hermosa.-me dijo cuando abrió la puerta.
-Fichissssssss.-bese su mejilla.
-Que milagro que me visitas.- Me dijo sarcasticamente.
-Casi siempre estoy contigo, no manches.- Me reí.
Entramos a su casa y nos pusimos a hacer tonterías, como siempre, Fichis y yo éramos muy unidos, aún que con Mariand también lo soy, pero casi siempre salgo más con el.
Estuvimos unas 4 o 5 horas haciéndonos tontos, comimos chucherías {comida chatarra, dulces, etc}, y grabamos cosas.
-Oye, ¿me acompañas?-me dijo mientras se comía unas fresas con chocolate.