Capítulo 24

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- Buenas noches amor – Le dijo Lena
- Buenas noches mi vida – Sonrió
- ¿Te veo mañana?
- Siempre ¿Quieres comer en casa con mis papás?
- ¿En serio? – Dijo sorprendida
- Sí, quiero que conozcan a mi novia
- Me encantaría Yul – Sonrió
- A mí también me alegra
- ¿Cuánto?
- Mucho – La jalo hacía ella
- Mi familia estará feliz de saber que ya soy tu novia
- Tu familia me adora
- No tanto como yo

Se acercaron suavemente y volvieron a besarse ambas familias las veían por la ventana tanto los Katin como los Volkov sonrieron satisfechos de ver a su hija con quien la hacía feliz, el beso era suave y mientras Lena tenía sus manos sobre los hombros de la morena que estaba recargada en el auto, Yulia tenía sus manos en la cadera de Lena el beso se hizo más intenso pero sabían que no podían dejarse llevar por la pasión ahí afuera se separaron con la frente aun pegada y se sonrieron

- Nuestros padres nos vigilan – Dijo Yulia
- ¿En serio? – Dijo sorprendida
- Sí, pero no los descubramos aun – Le sonrió
- De acuerdo, buenas noches mi Yulie
- Buenas noches Lena de mi vida

Lena entro a su casa y la morena suspiro para luego entrar ella a la suya sus padres las tapizaron de preguntas y ellas respondieron a todas y cada una de ellas y se fueron a dormir afortunadamente era sábado, Yulia se esmeró en que todo estuviera perfecto para cuando Lena llegara a comer

- Relájate un poco Yul – Dijo su padre
- Es que quiero que todo este perfecto
- Si amor, pero ya conocemos a Lena, y ella te conoce no es necesario que todo sea exagerado – Dijo su madre
- Bien, bien – Suspiro

Cuando Lena llego se sonrojo ante la mirada de los padres de la morena que estaba feliz sonriendo

- Mamá, papá ya conocen a Lena, pero hoy quiero presentarla como mi novia – Dijo sonriendo
- Me alegra saberlo cariño – Larissa abrazo a Lena
- Que sean muy felices – Las abrazo Oleg
- Muchas gracias – Dijo Lena sonriendo
- Pasemos a comer me muero de hambre – Dijo Oleg

La comida fue maravillosa, se había sentado a la mesa pero no había sido participativa como ahora, los Volkov estaban encantados y maravillados con Lena la cual estaba muy cómoda ahí y cerca de la hora de la cena Lena se retiró y Yulia la acompaño

- Felicidades Yul – Le sonrió Katya
- Gracias – Dijo feliz
- Sí, ya que iba a pedirte salir conmigo – Dijo Iván
- ¿En serio? – Dijo asombrada
- Sí, pero solo porque me gusta lo buena que eres en los videojuegos y tu auto, además de que eres divertida
- ¿Sólo por eso? – Lo observo
- Si – Sonrió él
- Bien, me siento indignada contigo enano, soy un partidazo – Dijo riendo
- Sí, pero te prefiero con mi hermana cuando está contigo cambia mucho y para bien – Le sonrió
- ¿Eso crees? – Dijo Lena
- Sí, me gustas más así vengan vamos a cenar
- ¿Te quedas a cenar? – La miro Lena
- Claro, ya estuviste en mi casa e hiciste frente a mi familia, yo haré lo mismo – La miro
- Pero ellos te bombardearán – Le acaricio la mejilla
- No me importa si estas a mi lado, además ellos me adoran ¿Recuerdas?

Lena sonrió y le dio un suave beso escucho una leve tos y se separaron sonrojadas, ahí estaba Sergey serio viéndolas a ambas la pelirroja apretó la mano de Yulia estaba sonrojada y quería ocultar su sonrisa traviesa

- Esto es agradable Volkova – Le dijo Sergey
- No sabe cuánto – Sonrió Yulia
- Más te vale que te comportes y la respetes
- Cla...Claro – Dijo sorprendida

Ambas se voltearon a ver y recordaron la escena del auto y su sonrojo fue mayor pero Sergey sonrió y las abrazo pasaron a la mesa e Inessa les sonrió tierna y en efecto como bien dijo Lena la bombardearon de preguntas a las cuales Yulia respondió amablemente cerca de las 23:00 horas Yulia se retiraba a casa

- ¿Qué harás mañana? – Pregunto Yulia
- El lunes tengo un examen y quiero ir a comprar unos libros – Sonrió
- Si quieres voy contigo
- Claro que quiero – Le acaricio la mejilla
- Siento que estoy soñando Len
- ¿Por qué? – La observo
- Jamás creí que fueras a fijarte en mi – La observo seria
- Ni yo que fueras tú a estar ahí presionando hasta que me sintiera mejor y volviera a ser yo – Le rodeo el cuello
- Pues somos la una para la otra – Sonrió

Se dieron un suave beso y luego se despidieron, pasaron los días y Yulia había estado muy misteriosa con Lena, lo cual la ponía de nervios, no sabía que estaba pasando con su novia, la encontraba hablando por teléfono y colgaba o le llamaban y contestaba que no podía atender en ese momento pero no quería ser paranoica, hasta que ya no aguanto más

- ¿Qué pasa Yul?
- No sé a qué te refieres Len ¿Pasar de qué? – La abrazo
- Eso mismo quiero saber, esas llamadas misteriosas, tus escabullidas, tus tardanzas, que no llegas o me cancelas – Dijo seria
- ¿No me digas que estás celosa? – Sonrió
- ¿No me digas que tienes a otra? – La observo muy seria
- No Len solo tú, para mí no hay nadie más – Le sonrió
- ¿Lo juras? – Dijo no tan convencida
- Si, te lo juro y es sólo que estoy haciendo un trabajo, una sorpresa
- ¿Una sorpresa? ¿Para quién? – Dijo curiosa
- Para... Pues para tu familia y la mía
- ¿Puedo ayudar? – Dijo emocionada
- No te preocupes Len que ya todo está listo
- ¿En serio? ¿Qué es?
- Nada extraordinario pequeña, pero si necesitaré que me ayudes – Le sonrió
- Claro ¿A qué?
- Necesito una pianista
- ¿Q...Que? No, no Yul yo no puedo yo...
- Si tú, quiero y necesito que seas tu
- Pero... ¿Por qué yo? – La observo
- No conozco alguien mejor
- Ni si quiera me has visto o escuchado
- Claro que si – La atrajo hacía ella
- Yul...
- He visto tus videos, tus presentaciones y sé que en ese cuadernito escribes música quiero que lo hagas por favor
- No, es que no creo poder yo... No quiero, no aún no
- Por favor Lena
- Pero...
- Por mí, hazlo por mí – La miro tierna
- Yul...
- Por favor
- No me pongas esa carita – Le abrazo por el cuello
- Dime que lo harás
- No creo que me salga Yul – Suspiro
- Al menos dime que harás tu mayor esfuerzo – Le sonrió
- Bien, pero no prometo que sea perfecto tal vez salga corriendo
- Yo estaré ahí
- De acuerdo, si tú estás conmigo no sé qué pueda hacer
- Lo harás perfecto
- Pero...
- Di que si – Le beso la mejilla
- Es que no estoy segura Yulia, tú sabes que...
- Tómalo como un último paso, si después de esto no quieres volver a tocar jamás, yo seré la primera que te apoye – Le beso la mejilla
- Pero...
- Te recompensare, te daré lo que quieras, haré lo que tu pidas – Le sonrió
- Bueno, está bien lo haré
- Esa es mi chica – Le beso el cuello
- Yul no, sabes lo que provocas – Dijo agitada
- Eso quiero, provocarte – Le sonrió
- No, aquí no – Beso sus labios

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