Una segunda oportunidad

- Dia Cuatro -

Despertaste tranquilamente, esta noche habías podido descansar un poco mejor en comparación a la noche anterior, por algún extraño motivo tus sueños habían morado los recuerdos de tu anterior línea del tiempo. Entre esos recuerdos viste algunos recuerdos sobre algunos de tus amigos principalmente Jade, recordabas a la perfección su rostro y la tristeza que reflejaba cuando te dirigía la mirada.

Al menos el final de tu sueño no fue tan malo ya que recordaste el abrazo que te había dado la Rose de esta línea del tiempo, aun tenias esa sensación muy presente en ti y de alguna manera te hacia estar feliz.

Te levantas de tu cama para luego ir a tomar un baño, el día parecía menos brillante que ayer y eso se notaba mucho ya que una capa de nubes no dejaba pasar ningún rayo de sol, supones que esto es el invierno en este lugar y por ello hacia tanto frio.

No te sorprendería que en cualquier momento empezara a caer hielo del cielo, el termómetro de una aplicación en tu móvil indicaba que habían -2 c en la ciudad y para alguien como tu que vivía en un lugar muy cálido la mayor parte del tiempo era un congelador. Hacer algo de comer también era un fastidio pero a la vez una bendición por el calor que emanaba la propia estufa, un poco de café y unos sándwiches de queso más tarde estabas mejor y con el estomago lleno.

Al ver que tenias aun mucho tiempo de sobra comienzas a inspeccionar la casa en una manera más calmada, el día anterior tenias una extraña prisa pero en la actualidad te encuentras muy calmado. No encuentras nada fuera de lo normal que no habría en una casa pero hubo algo que te causo un poco de curiosidad, las imágenes que antes estaban colgadas en la sala de la casa habían desaparecido, supones que el otro tu debió llevárselas como un recuerdo de su vida aquí.

Extrañamente solo estaban los cuadros colgados, como si solo hubiese sacado la foto del marco, comienzas a quitarlos de la pared ya que sería un poco extraño que solo estén los marcos vacíos, dejas la pila de marcos vacíos en la mesa y luego vas por tu mochila que aun seguía contra la pared de la sala, no recordabas muy bien si habías traído alguna imagen de tu línea del tiempo pero valía la pena buscar un poco.

En la mochila se encontraba unas cuantas cosas, ropa y algunas otras cosas y entre ellas había solo una foto que era la que se había tomado con su hermano hace algún tiempo en el pasado, en la foto te vez cuando tenias 13 años de edad, era incluso anterior al propio juego que cambio tu vida.

Decides colgarla en la pared, así que la colocas en uno de los marcos vacios y la cuelgas en la pared. De alguna manera te traía una sensación reconfortante y hasta te daba un sentido más de hogar al lugar.

Antes de que te des cuenta y eran las cuatro de la tarde así que te diriges a tomar otro baño y luego vestirte apropiadamente para el encuentro, aun no entiendes porque siempre tienes esa necesidad de verte bien cuando vas a encontrarte con ella al parque pero aun así lo haces con todo gusto. Mientras estas vistiéndote te llega un pensamiento que hace mucho estaba en tu cabeza y era el decirle quien eres realmente, te asustaba la idea ya que no sabrías como reaccionaria ella ante tal declaración.

Había una alta probabilidad en tu mente de que esto sería la causa de que todo vuelva a hacer tan vacio como era antes tu vida y de alguna manera encontrarte con ella en estas últimas a sido de mucha ayuda para ti como para arruinar eso.

Suspiras pesadamente, al final pronto pasaría y te quedarías solo otra vez, al menos disfrutarías de esta noche antes de decir cualquier cosa. Tomas un poco de dinero y lo guardas en uno de tus bolsillos.

Antes de salir te colocas la bufanda roja que te había regalado ella, prácticamente la bufanda olía como Rose, te aseguraste de cerrar adecuadamente la casa para luego caminar hacia el parque, prácticamente ya te sabias de memoria el camino al parque a pesar de que solo tenias unos cuantos días asistiendo a él.