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Capítulo 4: Frágil

La mañana se presentaba lluviosa.
Fueron, de hecho, los agresivos golpes de las gotas de agua contra el tejado y las calles los que me hicieron abrir los ojos aquel domingo.
Llovía tanto que se me pasó por la cabeza contactar con Shinobu para posponer el entrenamiento de baloncesto... No obstante, decidí esperar hasta la tarde y ver si amainaba. Además, nunca habíamos intercambiado nuestros números de teléfono, me sería casi imposible dar con él.

Pasé prácticamente toda la mañana pegado a la ventana, suplicándole a las nubes que cesaran su continua deshidratación.

La cuestión era, ¿por qué deseaba tanto tener ese entramiento?

Algo raro había despertado en mí desde que conocí a Shinobu, algo que desconocía por completo...
Tan sólo sabía que no podía tratarse de amor, por Dios, éramos dos chicos.

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La lluvia comenzó a aflojar casi milagrosamente y treinta minutos antes de la hora acordada había cesado por completo.

Esto me permitió dirigirme hacia la cancha de nuestra preparatoria, la techada por supuesto, para encontrarme con Shinobu.

Cuando llegué se encontraba vacía, no había ni rastro de vida en la zona, así que, sin más inclinación, pasé hacia el interior y me senté en un banquillo a esperar.

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Pasaron algo más de veinte minutos hasta que Shinobu apareció por la puerta.
Su respiración se sentía muy pesada y se encontraba empapado de arriba a abajo.
¿Cuándo había empezado a llover?
Estaba tan ocupado pensando en lo que haríamos en la lección que ni noté la que estaba callendo afuera.

Rápidamente me dirigí hacia él, que se encontraba encorbado, para preguntarle si estaba bien, ya que se veía extremadamente cansado.

-Kohaku: ¡Oiii Shinobu! ¿Estás bien? Vienes todo mojado y además pareces destrozado. *le ofrecí mi mano para ayudarle a enderezarse*

-Shinobu: *su respiración se aceleró aún más al mismo tiempo que extendía lentamente su mano hasta encontrarse con la mía*
Estoy bien *respiró profundamente* Aaaahhh~

-Kohaku: ¿Estas seguro? *fruncí el ceño indicando mi incredibilidad*

-Shinobu: Sí, solo necesito... *paró para tomar una larga respiración* reponerme un poco... No serán más de diez minutos *susurró algo* -al menos no deberían-.

-Kohaku: Shinobu...

||Ese extraño sentimiento que venía atormentándome las últimas semanas se apoderó de mí. No sabría decir si fue debido a los bruscos cambios del clima que me tenían algo alterado e inestable o si fue por el estado de Shinobu que me hacía querer protegerle y/o compartir ese malestar con él.
De cualquier forma no pude evitarlo y terminé envolviendo su pequeño cuerpo con mis brazos... Creo que eso era un abrazo...||

-Shinobu: ¿K-Kohaku? *su corazón se aceleró a tal ritmo que podía sentirlo golpear contra mi cuerpo*

-Kohaku: Eee- *me alejé de inmediato cuando me dí cuenta de lo que estaba haciendo* L-lo s-siento muchísimo, n-no se qué ha pa-pasado *rápidamente tapé mi rostro -tan sonrojado que cualquiera podría notarlo- con mi brazo*

-Shinobu: Hahaha *comenzó a reirse con tal ternura que me hizo sentir que perdía el control sobre mí. Deseaba volver a sentir su calor, su corazón palpitante contra mi cuerpo* No te preocupes... Hacía mucho tiempo que nadie me abrazaba -a parte de mis padres, claro- *dirigió su mirada al suelo tratando de evitar cualquier contacto visual*

||Estaba entonces tan ocupado tratando de controlar mis impulsos que apenas me di cuenta cuando su sonrisa había caído... Al igual que su cuerpo, el cual se hayaba yaciente en el suelo tras recibir un gran impacto contra este.||

-Kohaku: ¡¡¡SHINOBU!!! *me agaché y lo cargué en mis brazos tan rápido como mi semi-paralizado cuerpo me permitió*
¿Estás consciente? ¿Me escuchas?
*estaba ya cerca del derrumbe cuando una dulce y sobrecogedora voz envolvió todo mi ser en una calidez inigualable*

-Shinobu: Ko-Koha...ku...? Yo... *pronunció esas palabras con gran dificultad y una voz terriblemente débil y temblorosa*

-Kohaku: No te sobreesfuerces, ya me contarás más tarde, ahora voy a llevarte al hospital. *lo cargué corriendo en mis brazos con un único objetivo en mente: llegar al hospital más cercano, que por suerte no estaba a más de 15 minutos caminando*

||Las gotas de agua golpeaban mi espalda y mi cuello; se sentían tan frías que por un momento olvidé la calidez que emanaba del cuerpo que llevaba y trataba de proteger.||

× × ×

Y hasta aquí hemos llegado hoy.

He de disculparme por el retraso en subir capítulo nuevo.

¡Espero que la espera haya merecido la pena!

Nos vemos prontito >w<

〜 Vera ♡