Chico Transparente [Yaoi]

Día 3

La nieve caía. Todo a nuestro al rededor estaba teñido de un impecable blanco. Hacía frío, el vapor de nuestras bocas salía y se desvanecía mezclándose con el frío invierno.

-¿Estás bien?- Dan está a mi lado y su mano roza con mi mejilla.

Me está hablando. Dios. Me ve. El tacto de su piel deja en mi mejilla un ligero ardor. Estoy sintiendo.

-Sí... estoy bien- las comisuras de mis labios se elevan formando una sonrisa al igual que lo hace Dan. Cielos. Puede escucharme.

Su mano envolvía la mía calidamente. Era notablemente más grande que la mía.

No sabía dónde estábamos, cosa que no me sorprendía, pero lo recordaba. Fue como si este camino y yo fuéramos viejos amigos que se encontraron después de un largo tiempo.

Los árboles cercaban nuestro camino y sus ramas cargaban nieve haciéndola caer después de un gran peso.

Dan se sentó en una banca y yo me recosté sobre sus piernas. Su mano acariciaba mi cabello y de vez en cuando se inclinaba para besar mi frente.

-Dan... te amo.

-Y yo a ti, pequeño.

Nuestras voces fluían como si platicar fuera una acción común entre nosotros.

Aunque no recordaba cómo habíamos llegado ahí, me sentía tranquilo. No estaba esa pared invisible que cortaba toda comunicación con Dan.

No hacíamos gran cosa. Había dejado de acariciar mi cabello para pasar a apretar delicadamente mis mejillas.

-Hey, ¿prometes estar por siempre a mi lado y nunca más dejarme solo?

-Pero Dan, yo nunca te he dejado solo- me levanté rápidamente y tomé su rostro entre mis manos haciendo que nuestras frentes quedaran juntas-. Estoy aquí, prometo nunca irme, por nada de el mundo te dejaría...

Sus labios interrumpieron mi discurso. Sus fuertes brazos me acercaron a él rodeando mi cintura y yo sólo me dejé llevar.

Acaricié su sedoso cabello. Se sentía tan bien entre mis dedos. Su respiración empañaba mis lentes y Dios, sus labios. Sus labios se movían suavemente sobre los míos como si cualquier movimiento brusco fuera suficiente para romper ese momento.

Y vaya que lo fue.

Abrí los ojos exaltado y al parecer Dan reaccionó igual. Su rostro se mostraba sorprendido y movía la vista por todas partes.

Cuando al parecer encontró lo que buscaba salió de la cama hacía el escritorio con las montañas de libros. Por poco caigo de la cama por lo repentino que fue su movimiento. Me levanté también y fui a su lado.

Dan había tomado la foto que estaba sobre el libro que tenía su nombre. Sus ojos lloraban nuevamente pero, por alguna razón sonreía.

-Soñé contigo... estás aquí, ¿cierto?

¿Estás hablando de mí?

Entonces, lo que vi sólo fue un sueño. Qué triste. Pero, oh Dios, se sentía tan real. Aún podía notar la presencia de sus labios sobre los míos.

Pero, ¿yo era el chico de el sueño? No lo sé. Tal vez no. Digo, soy transparente, no tengo color alguno. Y en el sueño Dan podía verme y escucharme pero aquí, en su cuarto, no puede hacer eso.

-¿Recuerdas ese día? Cuando nos tomamos la foto. Tuviste que quitarte los lentes porque se empeñaban demasiado...

Dan dejó la foto de nuevo sobre el libro, pero esta vez la dejo boca bajo.

-Joder... te extraño- su sonrisa se borró y volvió a tirarse en la cama.

Me doy cuenta que Dan y yo tenemos algo en común. Él y yo tenemos el corazón roto, y por cada segundo que respira se rompe aún más. Y también compartimos el hecho de que la persona a la cual amamos no nos puede escuchar.

Daría el simple hecho de existir por que Dan estuviera junto al chico de la foto. Por que ya no lo viera llorar.

Dan... me estás matando...

Me recosté a su lado mientras lo veía llorar. Debe ser bonito llorar y poder gritar para aminorar el dolor. Debería ser bonito que te notaran. Debía ser bonito no ser transparente.

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Este capítulo está dedicado a MaaureenMMaryCox, de hecho creo que toda esta historia está dedicada para ella.

Perdón por hacerte sufrir tanto ;-; sabes que te quiero♡

Escuchen la canción de el principio y lean. Hasta yo lloré al hacer eso ;-;(?????

Gracias por leer
♡