Las Crónicas de Rombalia

Capítulo 2: Estrategia Secreta

Anth era un joven rubio, con los ojos verdes, muy profundos e intensos. Sus orejas eran puntiagudas, tenía el pelo largo y resplandeciente, además era alto y grande, por lo que se notaba que era un hombre fuerte. Su piel era blanca y lisa, llevaba un traje de tela verde muy ancha, ya que por Rombalia el clima era un clima poco cálido menos en verano, donde una ola de calor abrasaba el reino. 

-¿Qué ocurre, papá?-preguntó Anth una vez entró a la cabaña

-Verás, hijo mío... nos acaba de llegar una importante noticia que está ocurriendo en la sección principal del reino, donde se encuentra el castillo del rey. Los enanos están atacándonos actualmente. 

-¿Qué, en serio?-Su tono cambió totalmente-papá, sé que no quieres que me convierta en guerrero, pero necesito ayudar al reino, por favor...

-No me había dejado acabar, hijo..... Escucha, eres un increíble guerrero, tienes grandes habilidades con la espada, además de tu fuerza y altura. Nunca he querido que te convirtieses en guerrero por que eres alguien muy importante para todos... Pero creo que ya has madurado así que quería proponerte algo: si sales ileso de la guerra, te dejaré participar en el ejército real.

-¿De.... De verdad?

-Sí

-Pues, entonces.... ¡Me esforzaré al máximo!

-Está bien, que no te pase nada... Cuento contigo

Anth echó un último vistazo a su padre: tenía poca cabellera blanca debido al envejecimiento, aunque un cuerpo muy robusto y fuerte gracias al cual podía continuar luchando en una guerra sin problema alguno. Pero en esa guerra no iba a ser él quien participase, pues para eso estaba su hijo allí. Dicho esto, salió dela cabaña y, a una velocidad extraordinaria, se dirigió corriendo hacia el castillo.

La batalla en las murallas de Rombalia estaba siendo dura. El suelo estaba empapado de sangre, debido a la cantidad de muertes que estaban ocurriendo. La guardia real del rey estaba enfrentando a todos los enanos. La guardia, dirigida por el coronel Hugman, era el orgullo del reino, ya que eran 14 guerreros de gran valor y corazón. Anth lo observaba todo sobre un alto arbusto. En cuanto tuvo la oportunidad de ver a un enano aislado del resto, salto hacia este y lo derrumbó, pero antes de matarlo, prefería interrogarlo, así que le comenzó a interrogar:

-Dime, ¿qué sabes de la estrategia que tienen preparada los enanos?

-¡Jamás diré nada que pueda estropear nuestra estrategia a un simple hombre!

-Está bien, pues no tengo otra elección...

Dicho esto, sacó su arco y lo apuntó al cuello,dispuesto sin problema alguno a disparar.

-¡Está bien, te lo contaré todo!-Respondió el soldado con furia-Romni, el príncipe de los enanos, está preparando un ataque adentro del castillo desde una ruta subterránea que sólo los enanos conocen... Se encuentra bajando por las cloacas del castillo, y tomando la ruta principal de la derecha.

-¡Perfecto, ya sé adonde ir!-después, miró al enano-te estoy muy agradecido por la información, pero te tengo que atar a este árbol para que no cuentes nada, con tu permiso.

Después de dejarlo atado, se dirigió hacia las heladas cloacas del castillo.