En la imperfección está la perfección.

Alfa

Disclaimer: Los personajes de One Punch Man no me pertenecen, sino a su autor (a nomino), El manga es ilustrado por Yusuke Murata y One (historia), el anime pertenece a los estudios Madhouse. Este fic lo hice sólo y únicamente como diversión.

Personajes: Saitama/Genos

Aclaraciones y advertencia: Este fic romance, lemon, mención de mpreg y lo que se me vaya ocurriendo, kesesesese.

Resumen: Omegaverse. Genos hará lo imposible para demostrarle a Saitama que él es digno de estar a su lado y formar un vínculo entre alfa y omega.

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En la imperfección, está la perfección

Capítulo 02.- Alfa

Genos fue el primero en despertar esa mañana. Contempló a su maestro, plácidamente dormido entre sus brazos; no pudo evitar sentirse dichoso de estar junto a Saitama, y conocer al omega oculto tras el beta, eso, lo hacía más sorprendente.

Se levantó, con cuidado de no despertar a su maestro; debía preparar el desayuno, uno excelente que animara al mayor.

Saitama se levantó media hora después; al principio parecía melancólico, pero luego del desayuno, volvió a ser el mismo. Pasó la mañana viendo la televisión y leyendo mangas, mientras Genos hacía las tareas del hogar. Los alfas, no debían realizar tales tareas (al menos eso creía la gran mayoría), pero su padre le enseñó que la casta no te inutilizaba para lavar la bajilla o fregar los pisos, él mismo solía ayudar a su esposa con las labores del hogar.

—Sensei, ¿desea un poco de té? —preguntó Genos. Llevaba su acostumbrado mandil rosa; acababa de tender la ropa y estaba por iniciar con el baño.

—No, gracias —respondió el hombre calvo sin despegar la mirada de su lectura. El rubio asintió con la cabeza y reinició sus labores. —Genos —el cyborg se detuvo.

—Dígame, maestro —Saitama se incorporó para quedar sentado y le hizo una señal al menor para que lo hiciera delante suyo.

El héroe calvo sentía una fuerte opresión en el pecho a medida que su joven aprendiz acataba sus órdenes. Era consciente que el cyborg no intentaría retomar el tema de ayer, pero él necesitaba (por alguna extraña razón), saber si algo había cambiado, si Genos estaría molesto por ocultarle la verdad.

Saitama ya no era ese omega sonriente, lleno de vida al que su alfa se había encargado de destruir, de matar su corazón y congelar sus sentimientos; ahora era un beta, apático, sin más aspiraciones que encontrar un adversario digno, uno que le diera la emoción de sus inicios como héroe. Genos le devolvió la luz perdida, le estaba enseñando a ser humano una vez más, era su sol y no quería perderlo, eso, seguro lo destruiría.

—¿Te molesta que te mintiera sobre ser beta? —Genos negó con la cabeza. Saitama sintió un gran alivio.

—Creo que sensei es aún más increíble de lo que pensé —el mayor desvió la mirada; el cyborg siempre se las arreglaba para decir cosas demasiado bochornosas. —¿Le molesta que lo besara? —Fue el turno de Saitama para negar —¿Puedo volver a hacerlo? —una afirmación. Los labios de pupilo y maestro, rozándose, conociendo nuevos terrenos pero sin atreverse a ir más allá.

Genos tomó las manos de Saitama entre las suyas, lentamente recorrió los brazos del omega, pasando por su espalda y finalizando en su cadera; lo atrajo a su cuerpo. Despacio. Ambos perdieron el miedo y comenzaron a dar más de sí en aquel beso.