Lista de Imperfecciones [S.Coups] |ADAPTADA|

Charla de chicas grandes [Parte 3]

Me acerque lentamente a la mesa. Realmente no me apetecía sentarme con ella; no, no era que me cayera mal ni nada ¡Al contrario! Seungcheol tenía toda la razón cuando la describía como una chica amable y dulce. Moví mi cabeza despejando esos pensamientos. Ella no era la culpable de todo este embrollo, y yo no tenía porque ser una bruja con ella.

- Hey Elena - salude, sentándome frente a ella. La chica sonrió a modo de saludo.

- ¿Joshua es tu novio? - Me pregunto sin tapujos, acomodándose a mi lado para escuchar y hablar mejor. La música no sonaba tan fuerte desde este lado del club.

- Eh, uhm, ¿Si? - respondí torpemente. Claro, no era realmente mi novio, pero el le había dado a entender a Seungcheol que si, así que... yo solo le seguía el juego ¿no? Elena sonrió.

- Es un buen chico - Asentí afirmando su oración - Seungcheol también lo es - rodó sus ojos - Aunque tu ya debes saber eso - Soltó una pequeña risita que yo acompañe, con una más irónica.

- Claro, un buen chico cuando se lo propone - murmure, dándole un pequeño sorbo a mi bebida - Joshua y tu fueron novios ¿cierto? - Elena me miro con asombro en sus ojos y sus pálidas mejillas se tornaron de un adorable rosa. Como dije, soy directa algunas veces.

- Eh, si - respondió avergonzada - Pero eso fue hace un tiempo, por eso me sorprendió verlo otra vez - Asentí, sin encontrar nada más que decir. 

- Uhm, ¿___? - me llamo, luego de que estuviéramos unos minutos en silencio y yo centrara toda mi atención en mi bebida.

- ¿Si? - respondí, levantando mi vista y topándome con sus grandes ojos de un tono grisáceo.

- ¿Sabes donde esta Seungcheol? - Me pregunto con preocupación. Cierto, el andaba semi-ebrio caminando por ahí y no había vuelto... Y Joshua tampoco.

Entonces ahí fue cuando pensé lo peor.

Gracias al cielo los dos aparecieron, cada uno con una bebida en su mano. Joshua me sonrió de una extraña forma y se sentó junto a mí, mientras Seungcheol tomaba asiento junto a Elena frente a nosotros. Si, esto es lo más incomodo que me haya pasado en la vida. La música de fondo ayudaba a que no fuera necesaria la charla entre nosotros, y cada uno estaba centrado en el vaso que sostenía entre sus manos.

Simplemente g-e-n-i-a-l.

- ¿Quieres otro? - me saco de mis pensamientos con esa pregunta, lo mire confundida y apunto a mi vaso... vacío.

Asentí, el se puso de pie y desapareció nuevamente entre la gente.

Oh, esto si que era genial. Éramos el trío perfecto.

- ¿Cómo se conocieron? - Me pregunto Elena con genuina curiosidad, apoyando su cabeza en el hombro de Seungcheol. Y como yo no era una mujer celosa, nada paso con ese gesto.

- Oh, bueno - rasque mi nuca suavemente y continué - Pedí una pizza - me encogí de hombros, sonriendo ante el recuerdo de Hoshi preguntándole si era striper. Elena me sonrió cálidamente y Seungcheol... bueno, el volvió a sonreír con burla. Juro que si lo seguía haciendo lo golpearía, no todos tenían los lujos que el gozaba.

- Hey ___ ¿Cuando es su cumpleaños? - Me pregunto Seungcheol recargando sus brazos en la mesa y posando su cabeza en sus manos. Fruncí el ceño ante su pregunta.

- Uhm, n-no lo se - respondí confundida. Elena miro a Seungcheol por unos segundos y agacho la mirada.

- El treinta de diciembre - susurro tenuemente, revolviendo sus manos sobre la mesa.

- ¿Cual es su color favorito? - Volvió a preguntar Seungcheol. Mi rostro decayó al darme cuenta de que no sabía nada sobre Joshua.

- No lo se - murmure en un tono bajo de voz.

- El azul, negro y naranja - volvió a susurrar Elena con un deje de tristeza.

Levante mi vista y vi a Seungcheol mirar a Elena con una sonrisa plantada en su cara. Dios ¿Le alegraba que ella supiera todas esas cosas de él? Ladee mi cabeza un poco mirándolo incrédula, hasta que sus ojos se toparon con los míos...

Lo supe, el estaba haciéndome ver que Elena podía tener a Joshua cuando quisiera, al fin de cuentas no sabia mucho de él y ella parecía saberlo todo, me llamo la atención el color favorito de Joshua, aunque después de mirar los ojos de Elena me quedo más que claro. En fin, era como decir que me gustaba el mismo color almendrado de los ojos de Seungcheol... Ugh, sumamente cursi.

Jum, y pensar que casi caigo ante sus disculpas.

Sin ese casi habría caído nuevamente.

...

Nueve días me faltaban para acabar con la bendita lista. Me he hecho esta pregunta un millón de veces: ¿Para que la sigo? Después de todo, Caroline, Emily ni ninguna de ellas parece reacia a aceptar que Seungcheol no es perfecto, pero bueno explicarles a ella eso es como enseñarle latín a un pequeño de tres años. Realmente difícil. Admito que tal vez, no hacia la lista para ellas y que tal vez, solo tal vez, la hacia para recordarme a mi misma el tipo de persona a la que me enfrento, el tipo de chico del que estoy prendada. Hmpf, nunca pensé que el te gustara alguien resultara tan abrumador.

- ¡___, el desayuno! - Mamá grito desde el primero piso ¿Cómo la escuche? No tengo la menor idea. Mamá suele tener un gran vozarrón cuando suele llamarnos a Wonwoo y a mí. Baje la escalera perezosamente con mi pijama aún puesto, era sábado, no tenía para que arreglarme. Es más, pensaba quedarme en cama todo el día. Ah si, adoraba ese panorama.

- Hola, mamá - me acerque y le di un beso en la mejilla - Hey, oso - bese a Wonie también antes de sentarme a su lado a comer mi cereal.

- ¿Cómo estuve anoche cariños? - Nos pregunto mamá mientras fregaba la vajilla.

- Súper - contesto Wonwoo, con una gran sonrisa en su rostro - Mamá - se hecho una cucharada de cereal y continuo hablando - ¿Sabías que ___ tiene novio? - me atragante con la leche y fulmine a mi hermano con la mirada.

¿Por qué tenia que ser tan bocaza?

- ¿Enserio? - Mamá me miro por unos segundos y luego siguió con su tarea.

- Ajá, los pille in fraganti en el parque cuando... - patee a Wonwoo por debajo de la encimera, me dio una mirada molesta y se sobo su pierna.

- No es mi... novio, novio, es solo... - hice una mueca con mis labios - Joshua - finalicé encogiéndome de hombros, esperando que dejaran el tema ahí. Wonwoo me dio una de esas miradas que tanto odiaba.

- ¿Enserio? Por qué a mi no me pareció eso - chasqueo su lengua - Por la forma en la que se comían me pareció que... - volví a golpearlo, esta vez en su cabeza.

Mis mejillas se sonrojaron a más no poder cuando mamá me dio una mirada inquisidora.

- ¡Ey! Yo no ando ventilando lo que tu haces con Cath - espete enojada de que revelara mi vida privada.

- ¿Y como es? - pregunto mamá para que dejara de pelar con Wonwoo. Suspire, por su tono indiferente de voz supe que no estaba de acuerdo. Claro, ella quería, al igual que la señora Choi, que estuviera con Seungcheol. Pobres.

- Oh, el chico es genial - contesto Wonwoo pasándome por alto - Enserio, Seungcheol es un nada comparado con él - Wonwoo me guiño un ojo y sonreí. Si, mi hermano solía salvarme algunas veces, y ahí era cuando aceptaba que lo amaba.

- Me alegro por ti cariño - Soltó una leve sonrisa en su rostro. Jo, si claro mamá.