El Último Pétalo De La Rosa

"Desorientado" #3

*Me encuentro en un hospital, pero que tontería*
Son las 6 a.m., según lo que dicen los médicos me dejarán salir hoy, no me ha pasado nada grave y me podré recuperar en casa. Tan sólo 28 días y podremos vernos en la escuela.

Entró alguien a la habitación, era el doctor, no sabía que quería pero tal vez sería algo bueno.

-Buenos días joven - me dijo con una gran sonrisa, parecía que me daría buenas noticias.

-Buen dia - le dije con frialdad - ¿hay buenas noticias?

-Veo que está preocupado, tranquilo, te diré algo bueno - esa sonrisa me produjo felicidad, era tan carismático.

-¿Podré salir de esta cárcel hoy?

-Claro, pero primero tendrás que esperar que hagamos papeleo y en unas horas saldrás

*Que hagan lo que quieran con tal de que pueda salir de esta pocilga y verle*

Pasaron horas y horas y no me dijeron nada, sólo esperé hasta el anochecer.

Entró alguien a mi habitación y valla sorpresa, estaba ahí.

-Hola - se veía mejor que ayer - Ya estás mejor, así que te acompañaré a casa.
*¿Esto es real? Me está diciendo que me llevará a casa, esto es increíble*
-Dígame joven, ¿donde está su familia? - preguntó el doctor.
-Yo... no tengo.
*Pero que tonto soy, ahora haré que se preocupe por mi, no debí decir eso frente a... aunque pensándolo bien, me prestará más atención, pero si sólo nos seguimos viendo así nunca ocurrirá nada*
-¿Eso es cierto? - Me miró con sorpresa y cierta compasión - ¿Entonces vives solo?
*El doctor salió de la habitación silenciosamente para dejarnos solos. *Gracias doctor*
-Si- le respondí con la cabeza agachada, no sabía que más decir.
-Bien, entonces te visitaré diario- me regaló una gran sonrisa.
*Esta persona me acompañará a casa y me visitará diario. ¿Esto es real?*
-¿Y tú con quien vives?- por fin puedo preguntarle algo mas.
-Yo...
*Parece que no me quiere decir, mejor no le pregunto más sobre eso, pero aún así quiero preguntarle algo que no sé*
-Oye...- creo que tengo miedo de preguntarle,
-¿Quieres preguntarme algo?- lo pregunta tan directo, es el contrario mío.
-¡Si! - Joder lo dije casi gritando - quise decir... si, quiero preguntarte algo.
-Entonces, ¿Qué esperas?
-¿Cual es tu nombre?- espero que me diga.
-Que curioso eres. Bien te lo diré- por fin lo dira, esto es genial- me llamo...

Entra a la habitación el doctor y le interrumpe diciendo:

- Hola de nuevo, ya puedes irte.
*¿Es enserio? Justo cuando me va a decir su nombre interrumpe*
-¡Que bien! entonces vámonos, te acompañaré - dijo con gran alegría.
-N-n-n-n-no es necesario- dije titubeante- yo me puedo cuidar solo.
-Estás mal y es por mi culpa, así que déjame recompensarte.
Salimos de la habitación y fuimos a mi casa.
Cuando llegamos todo estaba como lo dejé días atrás, desordenado y sucio.
-Perdón por el desorden, se me olvidó limpiar y...
-Tranquilo, yo te ayudaré a limpiar
*Es tan amable; pero no le dejaré limpiar, después de todo es una visita*
-No, no es necesario, pero igual gracias por tu amabilidad - lo dije de una manera suave y calmada.
-Está bien, no hay problema, entonces te prepararé algo de comer - de nuevo lo dijo con gentileza y compasión.
-Supongo que no aceptaras un "no" como respuesta ¿O si?
-Jajaja, en tan poco tiempo y ya conoces tanto de mi.
-Pues parece que hemos pasado ya bastante tiempo juntos.
-Si, me pregunto si tú...
-Yo...
-Olvidalo
-Como siempre dejandome con dudas.
-Es mi sello personal - me dio una sonrisa pícara.
*T-e o-d-i-o*

Después de esa conversación me quedé callado y fui a mi habitación
27 días después pasó algo inesperado.

Aquella tarde me la pasé mirando la ventana...