— Majestad —sentí la voz de Guren y abrí los ojos para encontrarmelo vestido con el uniforme que usa en la serie.
— ¿Se encuentra bien? —volteé la cabeza y ví a Shinya vestido igual.
¿Qué es eso de "Majestad"? ¿Me están jugando una broma?
— ¡Yū-chan! ¡Al fin despiertas! —esta vez fue la voz de Mikaela— ¿Cómo se te ocurre dejar sólo a tu prometido por tanto tiempo?
¿Qué? ¿Prometido? Miré a mi "prometido" sin entender la situación. No me acordaba de nada de esto en el libreto... un momento ¿yo no estaba en una cita con Mika?
— Disculpen, ¿qué parte de la serie es esta? No recuerdo esto en el libreto.
— ¿Qué? —dijeron al unísono.
— Oye, debilucho —habló Mika— ¿te golpeaste la cabeza o algo así?
— No, es que... ¿en dónde estoy?
— En el castillo Mil Noches, Alteza —comentó Shinya.
Me reicorpore tranquilamente cuando, de pronto, oí un sonido de espadas y unos gritos muy fuertes seguidos de unos diálogos un tanto... ¿particulares?
— "¿Quién eres?" —preguntó la voz de una mujer.
— "El «Quién» no es más que una palabra reemplazante que cumple la función del «Qué»" —contestó una voz masculina, como si le estuviese tomando del pelo a la muchacha.
— "Sí, ¿y qué tiene que ver?" —preguntó, nuevamente, la mujer.
— "Que no le encuentro sentido a preguntarle a un hombre enmascarado quién es." —pues, viva la redundancia.
Los diálogos de esos personajes continuaron corriendo con fluidez por la habitación, y, al ver a mis acompañantes, me di cuenta de que ellos no los habían escuchado.
Un horrible sonido de explosiones súper fuerte me trajo de nuevo a la realidad. Abrí los ojos sobresaltado, estaba en la habitación de Mikaela, el cual, se encontraba a mi lado. Estaba cruzado de brazos por detrás de la cabeza y miraba la tele pacíficamente.
Me removí un poco y él me miró. Sonrió para luego abrazarme, bueno en realidad, puso sus manos a los costados de mi cadera y luego me regaló un beso en la frente, el cual hizo que me sonrojara un poco.
— ¿Ya estas despierto, Yū-chan?
— Se supone —comenté acomodándome un poco y él quitó sus manos—. ¿Estas viendo una película?
— Sí. Se llama "V de Venganza".
— ¿Es de terror? —me tensé.
— No —rió por lo bajo y yo relajé mis músculos—, es de acción y tiene un leve romance.
— ¿De que trata?
— De un terrorista, si te cuento no tiene gracia. Vamos a mirarla que recién comienza.
— Tuve un sueño raro —le dije en uno de los cortes— Me desperté en un castillo con un nombre extraño y tu estabas ahí junto a Guren y Shinya.
— ¿Sí? ¿Y que hacíamos? —rió divertido.
— Tu me rezongabas diciendo que eras mi prometido y te había dejado sólo, y los otros dos se reían de mí porque no entendía nada de lo que estaba pasando... en sima les dije "No recuerdo esto en el libreto".
Él me miró un instante y luego explotó en una carcajada. Yo me crucé de brazos y miré para otro lado inflando los mofletes sonrojado. Era eso, o lo golpeaba.
— Yū-chan, que sueños tan extraños tienes —se limpió una lágrima que se le salía del ojo—. Así que soy tu prometido ¿he?
— Ve tu a saber por qué soñé eso —me do vuelta tapándome con la frazada para ocultar mi sonrojo—. De todas formas, no creo en el matrimonio, así que olvídate de eso.
— Yo haré que creas —rió—. Ya comencé a hacer que creas en el amor.
Mikaela me abrazó y yo me sobresalté, no esperaba su acto. Él comenzó a darme besos en el hombro, lo cual me hacía cosquillas y sentía pequeñas corrientes que me daban escalofríos cada vez que sus labios se posaban en mi piel.
Un montón de pensamientos extraños se vinieron a mi cabeza y me tencé, Mika lo notó y me soltó. Me levanté rápidamente y corrí al baño. Mi entrepierna me apretaba, no entendía lo que estaba pasando.
— Yū-chan, ¿estas bien? —preguntó Mika desde el otro lado de la puerta del baño.
— Sí, no, no sé —respondí alterado.
— ¿Cómo que no sabes?
Ambos comenzábamos a ponernos nerviosos y abrí la puerta quedando frente a Mikaela y le señalé mi pantalón en el cual se notaba un bulto... bastante grande al parecer. Mikaela se sonrojó y me miró. Yo también me sonrojé y volvimos a mirar el bulto para luego mirarnos otra vez.
— Te juro... que es la primera vez que esto me pasa.
— ¿En serio? —me miró sorprendido y se puso mucho más rojo que antes.
— Sí... yo sé lo que tengo que hacer pero... pero... pero no quiero hacer eso.
— Ehh... ehh... —comenzó a mirar para todos lados— ... métete a bañar con agua fría —dijo exaltado y nervioso.
— ¡Pero me voy a congelar! ¡Piensa en otra cosa! —me inquiete.
— ¿Y por qué yo? ¡Tu piensa, es tu erección no la mía!
— ¡¿Qué haces tú cuando esto te pasa?! —pregunté exaltado.
— ¡Lo que hace cualquier hombre!
— ¡No voy a hacer eso!
— ¡Entonces mójalo con agua fría!
— ¡Eso tampoco! —ambos comenzamos a perder la paciencia.
— ¡Entonces cuida de él!
— ¡No lo haré!
— ¿Entonces te lo hago yo? —me dijo socarronamente.
—... ¿Qué cosa? —lo miré como “Si me estás hablando en serio, te mato”.
— Nada, sólo quería que dejemos de gritar y que los vecinos se enteren de lo que nos pasa. Ve y mójalo con agua fría.
— Pero... pero está fría —hice un puchero.
— No querés "cuidar" de él apropiadamente y no quieres mojarlo con agua fría, pero son las formas más rápidas. A no ser... —sonrió como un jodido depravado—... que quieras jugar conmigo un rato Yū-chan.
¿Jugar? No es momento para jugar... ah no, claro... ya entendí. Me sonrojé tanto, que el cuello me quedó rojo. Entré al baño y cerré la puerta tras de mí. Me quité la ropa y me senté en la bañera tomando la regadera para mojar mi entrepierna con el agua súper fría.
— Mikaela es... un idiota.
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Detrás de Cámaras (Mika x Yu)
RomanceHola, este es un fanfic de Mikaela y Yūichirō Esta historia sucede en el "Detrás de Cámaras" de Owari No Seraph. Los personajes creados por Takaya Kagami son los actores de ONS y con esta historia veran como son las relaciones con sus compañeros de...