17º (Wigetta)<AU>

3: Willy

                  

3: Willy

*Narrador*

Samuel. El recuerdo de la noche anterior lo fastidiaba con cada paso que daba, había salido a correr y ejercitarse como hacia diario desde hace más de 5 años, el recuerdo de aquel chico de los ojos achinados gimiendo de placer bajo si lo atormentaba pero al mismo tiempo lo enorgullecía, él chico, Willy el chico que le había derramado dos veces bebidas sobre el pecho, al que veía y le entraba una especie de  vomito bonito, si alguien se enterase de esto él y su reputación se irían directo a la mierda, todo esto era su culpa por dejar que le derramara la bebida, por dejar que sus mejillas de Willy se sonrojaran, por dejar que causara un efecto en él y por ultimo por haberse emborrachado y no poder recordar los gemidos de Willy, no poder recordar si era estrecho, o si era su primera vez, se odiaba por no poder recordarlo, se odiaba porque su ultimo recuerdo de la noche fue que salió de la habitación sin decir lo que sentía, sin decir que le quería, yéndose a besar a cualquier chica y tener más sexo, odiándose por quererlo, odiando a su popularidad, simplemente odiando todo.

Willy, hasta su nombre sonaba lindo, sonaba como el de un príncipe él quería olvidarse de su popularidad e ir plantarse delante y confesarle todo lo que sentía con cojones, el creía que Willy era tan lindo que había asistido a Precalculo, sin entender nada, pero lo había intentado, ni de coña le diría que siente, el estatus, ahora solo sentía que estaba haciendo todo mal, solo pensaba en que había sido un error y que talvez Willy no lo recordaba, pero el solo recordaba pequeñas partes, o el único que se le había grabado era la sonrojada cara de Willy a mitad de sus orgasmos.

Llego a la "Fraternidad", entro a la ducha de su habitación y se puso todos los acondicionadores contra la calvicie que tenía y había comprado;

-Todo por no estar calvo -susurro, como si en esa casa llena de alcohol, ruido y gemidos alguien lo fuera a escuchar.

Talvez el problema de Samuel no era Willy o su popularidad, talvez eso le venía valiendo tres cojones, era su gran e intensa homofobia, nunca le había dicho a nadie la razón y no planeaba hacerlo.

Salió a buscar a Rubén o Cheeto para ir a comer y se encontró con ambos hablando de una chica, lo más natural al parecer nadie había notado su acto con Willy.

-Si ella te convendría Rubén tiene buenas tetas y un muy buen culo, te juro que si ella fuera atrás de mi me la re follo

-Joder Cheeto! Que bien que no soy una chica que si no ya me habrías violado

-Vale, tampoco tanto pero Wren te conviene mucho, aparte es popular, esta buena, es linda y simpática

-Hola, chicos ¿Vamos a comer?

-Vale vamos, pero con la condición de que este pedazo de barbón no me moleste con esa chica -dijo Rubén molesto

-Wren?

-Si justamente esa

-Samuel por favor dile que la chica esta buena

-Está muy buena -de verdad eso opinaba Samuel- y es muy apretada -luego rieron

-Dios Samuel no nos cuentes tus historias de cómo te has follado a todo el colegio -dijo fingiendo asco Rubén

-Quieren saber que tan apretada es Lara? -dijo con tono pícaro

-Yo sí! -Grito desde la entrada Cheeto -¿Nos vamos?

Y se marcharon de ahí, fueron al Burger King.

En la noche decidieron salir de fiesta con Mangel, Samuel encontró a varias chicas que también salían de fiesta para el grupo, y como se esperaba follo con 2, si un trio en su habitación de la "Fraternidad" la cual aun así seguía oliendo a Willy y su shampoo de fresas silvestres.

Domingo 23 de Diciembre

Ese día partía Willy, partía en un tren a las 11:30 am así que salió para la estación a las 10:05 para "evitar catástrofes" le había dicho su madre, solo que Willy pensaba que la mayor catástrofe que le podría suceder seria encontrarse con Samuel.

Samuel y Rubén tenían que acompañar a Mangel para que fuera a su pueblo, -Por sobre todas las cosas -pensaba Samuel- no quiero encontrarme a Willy-. Partieron para la estación 10 minutos antes de que saliera el tren de Mangel 11:20 tenían que estar ahí si no querían que Mangel perdiera el tren, pusieron un disco con la canción "Liar" de One Ok Rock para la ocasión, a Rubén siempre le había gustado las cosas raras justo como esa canción, pero casualmente combinaba para la ocasión, y ahí iban los 3 amigos cantando a todo pulmón esa canción con el volumen al máximo. Llegaron a la estación 5 minutos antes, se despidieron y Mangel partió.

Ni Willy, ni Samuel, ni siquiera lo habían previsto. Pero el destino es caprichoso y quiso que los dos chicos se encontraran.

Samuel se giró por completo y ahí lo vio, parado a unos 3 metros, el chico de hace dos días, de hace casi 2 meses, el que lo estaba enamorando Willy. Hicieron contacto visual. Willy acababa de agarrar su maleta para ya ir hacia el tren y vio a la gran masa de musculo que era Samuel, el chico al que había evitado desde hacía ya 3 semanas, desde su salida con sus mejores amigos, con el que había follado hace 3 días, a unos metros de él. Era como si el mundo se hubiera parado por un momento, la melancolía, el remordimiento y el arrepentimiento se apareció de la nada, los dos mirándose como si nadie estuviera, con ganas de besarse pero sin poder hacerlo, ellos estaban en un lugar rodeados de gente que no los conocía pero también de gente que los quería y apreciaba. Ese momento paso, se rompió, con el sonido de una voz reconocible para ambos a kilómetros. Wren.

-¡Rubén, Samu, chicos! -gritaba desde la entrada la linda chica pelirroja

El momento se había roto, Willy volteo hacia su hermana menor haciéndole un ademan de su lentitud.

Rubén se escondía atrás de Samuel mientras el fingía que no había escuchado a la chica y volteaba a ver una tienda de regalos.

-¡Chicos porque no me hacéis caso!

-Oh lo siento preciosa -dijo mientras señalaba sus audífonos que estaban colgando de su camiseta

-Claro no te preocupes, oh Rubén que considerado buscar la fecha en la que partía de la ciudad para poderme ver, eres muy tierno- mencionaba con mucha euforia mientras hablaba de Rubén y le apretaba la mejilla a el mismo

-Emm, lo siento Wren tenemos que irnos que si no Cheeto se enoja ¿Verdad Samuel?

-Sí, bueno un gusto verte Wren adiós

-Adiós chicos -dijo con tristeza. Samuel volteo a todos lados buscando a Willy pero no lo encontró.

Willy mientras tanto estaba en los baños cansado de haber corrido tan rápido. Tenía su boleto en las manos, dejo que pasaran 5 minutos para poder salir hacia su tren.