Capitulo 18

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Narra Lauren

-Y bueno todo eso paso – dije mirando a Vero y Alexa.

-¿Todo eso? – hablo Alexa mientras que Vero no podía cambiar su cara de sorpresa.

-Si... solo eso.

-¿SOLO ESO? – gritó Alexa.

-No grites idiota es una biblioteca.

-Estas mal de la cabeza ¿verdad? Te fuiste un fin de semana a New York con Camila, bailaron, cenaron rico, recorrieron las calles de la mano y como si fuera poco....

-Te tatuaste – Vero por fin había hablado – no puedo creerlo, sabes que un tatuaje dura para toda la vida ¿verdad? Lo sabes cierto

-Si, si lo sé.

-¿Estabas ebria verdad por eso lo hiciste? – preguntó Alexa.

-¿Cuál es su problema? – las quede mirando – no, no estaba ebria, ni drogada ni nada de esas mierda. Lo hice y ya, fue un impulso.

-Gracias a Dios está en Griego – expulsó Alexa y mi vista se desvió hasta mi muñeca derecha y me di cuenta que el tatuaje podría estar en el idioma que fuera y aun así sabría exactamente lo que decía, sonreí – de que sonríes.

-De nada – dije mirándola -¿ustedes no tienen clases? – las dos elevaron sus cejas – no me miren así, vengo a decirles que soy inmensamente feliz, que tengo a una chica increíble y ustedes solo lo hacen mas difícil – ellas solo me miraban – no necesito gente que no me apoye en mi vida así que si no lo harán será mejor que salgan por la puerta que entraron y la dejen bien cerrada.

-Lauren... - susurró Vero.

-Tengo trabajo que hacer – me paré y caminé hacía la parte trasera de la biblioteca, sentí como ellas se levantaron de sus sillas y caminaron hacia la puerta, sentí como la cerraron y deje escapar un suspiro. Si había algo de lo que estaba segura era de que no dejaría que nada ni nadie me alejaran de Camila, ni siquiera mis amigas.

Después de pasar varias horas dentro de la biblioteca me di cuenta que era hora de almuerzo así que comencé a ordenar las cosas para ir al casino. Cerré la biblioteca y partí al campus principal donde se encontraba el casino. El tiempo era una mierda, creo que la lluvia no había pasado en 1 semana y el frío era casi insoportable.

Cuando entre me di cuenta que estaba todo muy vació, algunos alumnos almorzaban en los pasillos y leían libros, sonreí porque me imaginé a mi haciendo esa estupidez.

-Jauregui – voltee a mirar y era Austin, creo que no sería un lindo día.

-Hola – deje de caminar y me paré frente a él.

-¿Cómo estas bonita? – acarició las puntas de mi cabello y me alejé.

-Bien gracias, lamento no preguntar lo mismo pero voy algo apurada – le sonreí y me voltee para caminar hacía el casino entonces una de sus enormes mano agarró mi brazo – mierda – me inmovilizó de tal forma que caí de rodillas al suelo – mierda Austin que te pasa, suéltame – suplique para que me soltara y me di cuenta de que los pocos alumnos que había en el pasillo se marchaban por miedo a Austin – Austin, me duele ¡suéltame! – trataba de zafarme pero el dolor se intensificaba.

-¿Crees que puedes quitarme a la chica y andar como si nada por toda la universidad? ¿Enserio creían que nunca me daría cuenta? – el apretaba con mas y mas fuerza – eres una maldita lesbiana, eres una pobre idiota que no tiene nada para ofrecerle a Camila ¿escuchaste? NADA! – la rabia se apodero de mí y como pude me zafé de su mano, miré mi brazo estaba rojo, algunas partes moradas - ¿Enserio crees que ella te ama? Solo te tiene pena Jauregui, pena porque eres una simple bibliotecaria sin futuro, nunca estudiarás acá nunca – se acercó a mi y me acorralo contra una de las paredes - ¿sabes porque? – sentí como mis lágrimas comenzaban a caer – porque eres pobre, no tienes dinero, no puedes cumplir los sueños de Camila y cuando ella se de cuenta de eso volverá a mí, a mis brazos, a mi cuerpo – el mu idiota tenía una sonrisa de oreja a oreja.

Amor Entre Libros - (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora