Sensación

Hay momentos...

Hay momentos duros en la vida en los que toca pararse a reflexionar sobre todo lo que ha pasado, decepción tras decepción te acaban hundiendo, hundiendo hasta ese punto en el que nada te afecta, el punto cero. Cero fuerzas, empiezas a auto destruirte, a echarte todo en cara, a pensar que tú has sido el culpable de todo, que eres miserable. Estas son las épocas en las que te empiezas a replantear en que momento de tu vida empezó todo esto, en como has podido empezar a odiarte, a no poder mirarte en el espejo, a traspasar el límite de tus defectos.
Conoces a gente nueva, que ha llegado para abrirte los ojos.
Empiezas a ver la vida de otro modo. Empiezas a fijarte en los pequeños detalles, que al fin y al cabo son los que más cuentan en está vida de gente que intenta aparentar lo que no es por miedo al que dirán, sabiendo que vivimos en un mundo de imperfectos.
Yo decidí abrir los ojos. Llegué a ver a través de una simple mirada, lo rota que podía estar la persona que había a mí lado, aunque llegaba a tener la sonrisa más magnífica que había visto. En esta época me he dado cuenta de quien sí y quien nunca. He perdonado, he cometido errores, he dado todo por alguien que no daría ni un mísero céntimo por mí, he guardado rencor, he llorado, pero también he reído gracias a personas que día a día me han sabido escuchar y comprender , y han intentado sacarme una sonrisa y hasta que no lo han logrado, no han parado de intentarlo.