Saya Hatsune caminaba despreocupada por China Twon, Londres. Su día había sido perfecto: fue ascendida en su trabajo, el hombre que le gustaba la invitó a cenar, su hermana se casaría pronto y su padre había regresado sin problema de un caso de secuestro.
Se movía de forma elegante con sus zapatos de tacón de aguja. Llevaba un vestido negro bastante caro que resaltaba sus curvas y el pelo castaño recogido en una cola de caballo.
Lo que Hatsune no sabía era que en unos minutos esa felicidad que la inundaba desaparecería por completo y nunca más sería capaz de experimentarla. Bueno, ni eso ni ninguna otra cosa.
Un hombre empezó a seguirla, bastante cerca pero ella no lo notó. Él iba ataviado con un gran abrigo de cuero, unas botas militares y un sombrero que solo dejaba ver parte de su cara.
Saya se metió por un callejón, un atajo para llegar más rápido. En ese momento el sujeto la llamó. "Hatsune Saya" dijo con una sonrisa sádica en su pálido rostro. La chica se giró hacia él y fue lo último que vio antes de que le clavara un cuchillo directo en el corazón.
Ya muerta la tumbó en el suelo con las manos entrelazadas sobre su pecho, y en ellas colocó una rosa negra con una tarjeta.
>>Cortesía del señor Black<<
Con eso la dejó allí y se fue con las manos metidas en los bolsillos del abrigo y una media sonrisa en su rostro deforme.
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Skulduggery Pleasant, detective esqueleto: Athena Walker.
FanfictionLeah es una chica normal de Dublín, o al menos es lo que piensa. Pero cuando se encuentra con unos amigos empieza a recordar una vida en un mundo que no sabía que existía.
