AUBREY

4: Ransom James

Agente tres, agente tres ¿Quién coño era el agente tres? ¿Qué hará el? ¿Cómo será? ¿Sera mi nuevo guardaespaldas? Las preguntas resonaban en mi cabeza, no tenía idea de quién era el agente tres.

Hay cosas en la vida que nunca te llegas a imaginar y no todos los días de tu vida te das cuentas de que tienes un guardaespaldas. Yo nunca me imaginé tener un guardaespaldas personal. Y menos me imagine que haya muerto para salvar mi vida. Con solo el pensar en la palabra guardaespaldas, me da escalofrió y ahora pensar quién será mi nuevo guardaespaldas, hace que mi cuerpo reaccione de una manera inexplicable. Cuando menos lo esperaba, la puerta de esta maravillosa oficina se abrió, o mejor dicho alguien la abrió. No pude ver el intruso ya que estaba de espalda hacia la puerta. Simplemente el chirrió de la puerta escuche.

-Siento llegar tarde -Mi corazón se detuvo por unos segundos. Oh Dios mío. Yo conocía esa voz. La conocía perfectamente bien, para saber quién era el dueño de ella. Cerré los ojos y deseé que todo fuera un sueño. Respiré profundamente y me di vuelta a dirección del intruso, justo vi la cara sorprendida de Ransom James, mi boca se abrió lentamente.

-¿Qué haces... aquí? -Pregunté con dificultad.

-¿Puedo entrar?

-¿Estas fuera? -Pregunté con sarcasmo y encaje una ceja -¿Qué haces...? ¿Por qué estas... aquí? -Yo tartamudeé. Observe mí alrededor. Esto tenía que ser un error, una pesadilla necesitaba que alguien me pellizcará.

-Ransom James -Henry saludo al idiota, Henry estaba en su silla con la miraba fijamente a Ransom -Permíteme presentarte a la Princesa de Pietrocci, Aubrey Cavicchi. Aubrey, él es Ransom James, es decir agente 3.

Esto debe ser otro maldito error; esto no podía estar sucediendo, si Ransom James era un agente entonces continuación yo era una princesa. La verdad no importa si Ransom James es un agente, no tengo nada que preocuparme. Él era solo un chico que estaba ocupado todo el tiempo con chicas, en prácticas de fútbol y viendo canales porno y estúpidos partidos de fútbol. Él no podía ser un agente secreto, él era demasiado estúpido y arrogante. No podía ser un guardaespaldas, él era solamente un estúpido jugador de fútbol. Él es egocéntrico e idiota. No pueden poner mi vida en manos de él y ahora mucho menos sabiendo que tengo un acosador.

-¡No puede ser! ¡Él no puede ser mi guardaespaldas! ¿Qué es lo que les pasa? ¿Ustedes quieren que mi vida se arruine?

-¡Hey! -Exclamó indignado Ransom -Yo soy un buen agente y guardaespaldas. Aunque no tengo ganas de ser el guardaespaldas de una niñita mimada.

-Niñita mimada -Reí sarcásticamente -Si claro, tú eres un gran y buen guardaespaldas. O no, tu lo que eres un maldito guardaespaldas que solo tiene tiempo para jugar fútbol y follar con prostitutas...

-¡Aubrey! -La voz de mi madre, provoco que yo no siguiera insultando a Ransom -No sea maleducada para hablar. Discúlpate con el chico.

-¡Yo no soy maleducada! Yo solo digo la verdad -Dije defendiéndome. A veces soy muy arrogante en mi forma de hablar. Pero no es mi culpa, soy una princesa. Así me acostumbraron mis padres y ahora no puede intentar cambiar mi forma de ser. -¡No me voy disculpar con él! ¡Nunca! Y tampoco pienso trabajar con él.

-Ni yo pienso trabajar con ella ¿Quieren arruinar su vida? O no, si yo soy su guardaespaldas, mi vida será una mierda. Ella la va arruinar.

-Tú... espera ¿Qué? -Lo mire impresionada a lo que acaba de decir.

-¡Te odio!

-¡Yo te odio más, idiota! -Con odio lo seguí mirando. Después de varios segundos mire a mis padres. -¡Lo ven! ¿Ahora pueden ver como es el? Él no me puede proteger. Yo puedo sola, no necesito que alguien me cuide. Mis padres me miraron, en señales de faciales me pidieron perdón. Yo sé que ellos no le gusta la idea de que mi nuevo guardaespaldas me odie. Suspire y volví mi vista hacia Henry, desesperadamente le pregunte -¿No hay otra persona que puede ocupar el puesto de guardaespaldas? -Henry negó con la cabeza.

-Lo siento, Aubrey. Esta es la única y mejor posibilidad que tenemos. Él va la misma universidad que tú. Y Ransom es un gran agente y sabe hacer muy bien su trabajo. -Henry alabo a Ransom por su trabajo. Ransom sentó encima del escritorio, mirándome con orgullo. Podría haberlo golpeado, pero no lo hice. Simplemente enojada lo mire con odio.

-¿Qué? ¿Cómo que es la única posibilidad? ¿No puede conseguir a un buen guardaespaldas? ¿Cómo piensa poner mi vida en manos de un simple niñato? -Pregunte como loca.

-Aubrey... -Finalmente oí la voz pesada de mi padre ¡Bingo! Mi padre seguramente está de acuerdo conmigo. Así que no dije nada ya que el iba a decir algo importante, como darme la razón -Mi niña, no hay otra elección -¡Perdón! ¿Qué acaba de decir él? Oh por Dios. No creo lo que acaba de escuchar, él siempre me apoya, él siempre está de acuerdo conmigo.

-Pa...pá -Tartamudee. No me salían las palabras para defenderme, no tenía el apoyo de mis padres. Esta es la decisión más estúpida que han tomado mis padres en toda su vida.

-Es cierto -dijo Henry con firmeza -Sin embargo; podemos buscar a otra persona, pero seguro no vamos a encontrar a alguien que tenga la capacidad y experiencia que la que tiene Ransom. Aunque pueda buscarte otro guardaespaldas. No lo haré.

-¡Si lo puedes hacer! -Dijimos al unísono Ransom y yo. Henry rió.

-No lo sé, necesito tiempo para pensar en esa posibilidad. De que la Princesa Aubrey, tenga un nuevo guardaespaldas que no sea el Agente 3 -Henry se quedó mirando al techo de forma pensativa y después dirigió su mirada hacia mí. Le sonríe de forma amistosa dándole entender que estaba de mi lado que él había decido que Ransom no fuera mi guardaespaldas -Mi respuesta es NO. Siempre será NO, no pienso buscarte otro guardaespaldas. Te tendrás que acostumbra a Ransom, te guste o no.

-Henry, por favor.

-No.

-Pero...

-No. Mi respuesta es NO -Henry con enojo repitió cuál era su respuesta. Lo mire con enojo. Siento que odio a Henry por tomar esa decisión.

-Hasta luego, Henry -Mi padre se despidió mientras caminaba hacia la puerta, seguido de mi madre. Yo los seguí sin despedirme de nadie, ni siquiera mire a Ransom y a Henry. Cerré la puerta de un portazo antes que Ransom saliera, de seguro se golpeó porque escuche un chillido.

-¡Hey! -Grito el egocéntrico de Ransom -¿Puede ser un poco más amable con tu nuevo?

-¡No! Además lo de guardaespaldas no lo creo. Te doy unas semanas y ya no lo será -Le espete antes que él saliera de la oficina y corrí rápidamente a la escalera de caracol.

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