lágrimas

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Draco despertó, ya había pasado una semana desde que llevaron a Potter a la madriguera.

Hermione estaba a su lado con la fina sabana cubriendo su delicado cuerpo desnudo, sonrió al acordarse de la noche anterior.
Miro hacia el techo, muchas cosas le preocupaban y entre de ellas estaba su familia aunque estuvieran en la casa más salvaguardada y muggle del que se pudieran imaginar le preocupaba su seguridad, después deL funeral de Christian y Dumbledore se habían mudado a la antigua mansión de los Granier, la cual estaba protegida por hechizos y pociones. Nadie los encontraría jamás ahi, ni siquiera Dominic.
Suspiro y abrazo más fuerte a Hermione, tenerla entre sus brazos era lo mejor que podría pasarle.
Esa casa se le hacía familiar,y un recuerdo lo invadió, era cumpleaños de James y lo habían celebrado en la casa en la que ahora estában, Hermione habia asistido y por primera vez el la vio como en verdad era, hermosa con carácter y modales, llevaba una sonrisa en el rostro y cuando lo vio solamente se hizo más grande, pero no dijo nada, se comportó normal, habían salido por los jardines y le había tomado la mano, habían hablado como personas normales y el la había besado, y recordó la luz saliendo de la varita de los señores Parkinson.
Negó con la cabeza y sonrió.

Y de la nada también recordó su mejor travesura y el mejor plan que pudo haber planeado en su vida, ocurrió en el baile de los tres magos, había noqueado a Krum esa noche y tomo la poción multijugos, recordó haber ido por ella al pie de las escaleras y llevarla aL baile, hizo remembranza de la satisfacción que sintió al ver el rostro de Weasley distorsionado por una mueca, también hizo memoria de la risa de hermione cada vez que hacia una broma pensando que era Krum pero era él.

-Siempre lo supe ¿sabes?, esa noche que fuiste por mi, supe que eras tu- La voz de su esposa lo sorprendió, ella llevaba una sonrisa en el rostro.

le sonrió

- ¿y que me delató?

-El anillo que posa en tu mano izquierda, el de los Malfoy y el hecho de que desaparecías cada hora y cuando me fuiste a dejar a la torre de griffindor, cuando me besaste, ya eras tu, no Krum y lo más gracioso fue que no te diste cuenta, hiciste mal tus cuentas, tu cabello ya era platinado, tus ojos grises y tu piel blanca

-y aún sabiendo que era yo me besaste ¿Por que?

-A lo mejor ya me gustabas o simple curiosidad... No lo se, pero lo que sentí fue genial

-Te amo- dijo Draco y la beso sin esperar respuesta porque la sabía y no era necesaria

(...)

Durante una semana Ninphadora Tonks no había salido de casa, ni siquiera se había cambiado de ropa, había llegado a internarse a una depresión máxima, cosa que no pasó desapercibida para Draco...

Severus estaba en Hogwarts con su nuevo puesto de director tenia que acomodar todo para el primero de septiembre.

Una lechuza tocó la ventana de su nueva oficina.
El ave llevaba una carta amarrada a la pata, la reconoció de inmediato, era Ros la lechuza de Draco.
Abrió la carta

Me hiciste una promesa, Ninphadora esta muy mal, el bastardo hijo de... La a tratado como una escoria no merece esto, necesita apoyo, no a salido de casa durante una semana y no eS bueno en su estado. Sirius esta preocupado y yo también.
Te necesita.
P.S.
Pd: ve por red flu, su clave es flores de margaritas

Rodó los ojos al ver el seudónimo que había utilizado, príncipe de Slytherin.
De inmediato se debatió entre ir a verla o quedarse a esperar. No tomo mucho tiempo agarró su saco y se metió a la chimenea, pronunció las palabra y desaparecio entre las llamas verdes.

nuestro destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora