Pecado Mortal |✦| Keeping The Faith [Brian Finn/Edward Norton]

✿. | IV

¿Cómo habían llegado a eso? Primero le cuenta algo tan personal como la muerte de su madre y después están a punto de besarse. Además, odiaba como se sentía, porque en el fondo no podía negar lo tanto que deseaba darse ese beso con Brian.

Simplemente observaba el techo de su habitación, llevaba así más de media hora sin duda, estaba frustrada, no podía dormir, no dejaba de pensar en lo que pasó en la cocina con el rubio.

— Ya es muy tarde.— dijo al ver la hora en su reloj de pared, pasaba de la media noche.

Estaba a punto de cerrar los ojos y volver a inventar dormir, cuando tocaron la puerta, Holly primero se pregunta quién será a esta hora pero en seguida pensó en Brian, se paró velozmente y abrió. Era Brian.

— Holly, por favor. Perdóname por...— comenzó a hablar apenado Brian cuando la castaña lo tomo del brazo y lo metio a su habitación. Sentandolo sobre su cama y ella a su lado.

— Brian, ¿Qué no sabes que horas son?— pregunto confundida. Cuando intentaba dormir para no pensar en él, aparece.

— Si, pero no he dejado de pensar en ti— contesto sincero, dejando sin palabras por un momento a Holly—. Quiero pedirte una disculpa.

— No tienes que hacerlo.

— Claro que sí. Nosotros...— la castaña lo interrumpió tomándolo de los hombros.

— ¡Brian, yo también quería que me besaras!— admitió frustrada.

— ¿Qué?— dijo estupefacto.

Holly voltea los ojos, ¿Era tonto o se hacía? Lo acercó a ella y lo beso. Brian estaba sorprendido, pensaba que iba a estar molesto pero parecía todo lo contrario. Así que siguió el beso mientras que la tomaba de la cintura y con la otra mano acariciaba su mejilla y profundizaba su beso.

Después de unos segundos se separaron, y se sonrieron, no dijeron un solo comentario, se sentían cómodos y se recostaron sobre la cama y se abrazaron, solo así lograron conciliar el sueño.

Hasta que escucho unos golpes, Holly abrió los ojos, y se dió cuenta que había amanecido. Vio a Brian a su lado y sonrió, volvió a escuchar el golpe, estaban tocando su puerta, Holly se asustó. Se levantó y abrió la puerta Pero solo asomó la cabeza sin abrir completamente, para evitar que vieran a Brian en su cama durmiendo. Era el padre Havel y casi se le salen los ojos al verlo.

— Buenos días padre, ¿Qué sucede?— pregunto nerviosa.

— Buenos días hermana, venía a preguntar si habías visto a Brian, fui a su habitación y no lo encontré. Pero por lo visto no lo has visto, sigues en pijama. — soltó una risa al verla con su pijama de osos, ella le dió una sonrisa incómoda.