Perfil Bajo

#Chapter 26

Eran cinco chicos, todos me miraban como bicho raro y uno de hechos disidió hablarme. —¿Pero miren que nos ha traído la noche?

—Una bella princesa. —responde  otro. Quiero sacar mi arma, pero recuerdo que la deje en la casa de Axel. —Mierda estaba perdida. —pienso y muerdo mi labio.

—¿Como te llamas? —pregunta un chico de ojos celestes.

—Jodance. —les digo a todos con mala cara. No quería responder su interrogatorio. 

—Mmm tiene su carácter la muñeca. —otro  chico de ojos verdes me habla y se va acercando hacia mi.

—Aléjate. —le digo pero él solo se sigue acercando. Esto esta empezando a traumarme.

—Creo que podíamos divertirnos con ella esta noche. —se sigue acercando y yo me empiezo a asustar. Nunca antes me había pasado algo así. Tenía miedo.

Axel POV

Saco las llaves de mi bolsillo y me monto al auto de Sofia. Pero que le había pasado, se comporto como una loca al salir corriendo de mi casa. No la iba a violar ni nada solo estaba jugando. Creo que ella de verdad se asusto. 

Y ahora el asustado soy yo. No se donde rayos estará son las dos de la mañana y este barrio es peligroso. Le puede pasar algo, hasta la pueden llegar a violar ya ha pasado antes con varias chicas que vivían por aquí .

—No pienses en negativo, la vas a encontrar. —me decía yo mismo para tranquilizarme. Seguía conduciendo y viendo en dirección de todas las calles. No debía de estar tan muy lejos.

Manejo cuadras mas adelante, y veo un grupo de vándalos arrinconando a una chica. Trato de ver mas y esa chica en Sofia. Agarro la pistola que tengo en la guantera y doy disparos al aire. 

Los vándalos no se mueven y uno de ellos arrincona mas a Sofia. Salgo del auto y disparo a uno de ellos en el brazo. Este cae al piso.

—¡ATRÁS¡ —me grita Sofia y volteo. Era otro chico lo golpeo, y el también me golpea. Mi cara y manos duelen pero aún así lo sigo golpeando. Mi labio empieza a sangrar pero no me importa, sigo luchando con los demás chicos.

Me acerco a Sofia, la jalo del brazo y hago que corra al auto.

—Vete ya. —le digo. —Sube.

Yo también subo al auto, lo enciendo y  comienzo a manejar a toda prisa.

—¡NO VUELVAS HACER ESO¡ —le grito asustado. —Este lugar es peligroso. Te das cuenta que pudiste haber muerto ahí. 

—Gracias. —susurra y se que esta asustada. —Te dejaron mal. —acaricia mi labio.

—Tranquila. —pongo mi mano en su rodilla. —Estoy bien. —sonrío de lado. —¿Por que escapaste?

—Quería estar sola. —agacha la cabeza. —A veces me gustaría desaparecer.

—Yo te extrañaría mucho. —ella sonríe. —Me quede muy sorprendido al verte con esa pistola en la mano, nose yo woooooo me impactaste y asustaste al mismo tiempo. 

—Aún tengo ganas de ahorcarte. —mira mis ojos. —Igual a la tal Brenda esa chica es una...—la interrumpo.

—Sofia mejor tranquilízate. —suspiro. —Eso ya paso.

—¿Por que siempre lo arruinas? —pregunta y siento cierto tono de melancolía en su voz.

—Yo. —digo sorprendido. —Yo nunca he arruinado nada.

—Claro que lo has hecho. —dice molesta. —Te diré dos cosas. —me muestra dos de sus dedos. —La primera siempre que hacemos el amor ¿Usas condón? No. —dice irritada y esta conversación me parece graciosa. — Dos siempre después de hacer eso LO ARRUINAS. Me entiendes Lo arruinas.