Te Comeré [Yaoi-Hideki] EN EDICIÓN.

Capítulo 8

~Narra Tsukiyama~

“Me muero de ganas de probarte” susurré, Kaneki pareció oírme así que se volteó preguntando que había dicho y obviamente le mentí.

Cuando Kaneki se fue me quedé recostado mirando el techo, Kaneki... No quiero que nada ni nadie te aleje de mi lado, aunque vivas conmigo, ¿Quién dice que en algún momento no buscarás ser independiente? No puedo permitir eso, prometi cuidarte, y eso haré...

Sin más que pensar comencé a sentirme muy cansado, mi estómago comenzaba a vaciarse, no puedo quedarme hambriento, pero Kaneki está en casa y no puedo dejar que me vea comiendo.

Mis ojos comenzaron a pesar, me sentía triste al final de cuentas, pensar en el futuro y en la cara asustada de Kaneki al saborearlo me entristecía, ¿Ahora que pensará de mi?... Aunque su sabor era delicioso y soporté el no clavarle una mordida en esos momentos, no tenia planeado que esto pasara.

Cuando menos lo pensé, la tristeza me ganó y mis ojos terminaron completamente cerrados, cayendo en un profundo sueño, realmente comenzaba a sentirme mal.

Desperté al día siguiente, me sentía enfermo, ¿Me enfermé de tristeza? Oh Kaneki. . .

Mi mirada volvió a perderse, más ahora no duré mucho pensando en Kaneki, ya que alguien tocó la puerta de mi habitación. -Tsukiyama...- escuché la voz de Kaneki.

-¿Qué ocurre?- pregunté y el al saber que estaba despierto abrió la puerta. -Vaya, te vez muy triste- dijo y se acercó a mi, tocando mi frente, asegurándose de que no tuviese fiebre. -Un poco más y te enfermas, eso no está bien- susurró y alejó su mano de mi frente.

-Más que enfermo como dije antes te vez triste, si no puedes decirme que pasa lo entenderé, pero quiero decirte que he traído a alguien para animarte- Kaneki sonrió y miró a la puerta, ¿A quién habrá traído?

De la puerta se asomaron unos ojos grandes y llenos de alegría, acompañados de algunos mechones de cabello morado que eran visibles.

-¡Tsukiyama!- gritó el pequeño corriendo hacia mi cama, haciendo que me levantase de golpe.

-¡Kanae!- grité alegre, Kaneki, si antes te amaba, ahora te amo mucho más.

~Narra Hide~

-Bien, analizemos la situación- hablaba solo en mi habitación caminando de un lado a otro con mucha comida en mi cama sin terminar de comer.

-Yo soy. . . soy un Ghoul, no, un híbrido- me detuve en seco al pronunciar ello. ¿Ahora que haré? ¡Soy un híbrido! ¡¡¡Un híbrido!!! ¡El primer ser humano en ser mitad humano y mitad Ghoul!

Quería ir a la casa de Kaneki para darle la sorpresa de que había salido, pero no conté con esta curiosa particularidad que ahora era parte de mi.

Me senté en la cama empujando la comida que antes era deliciosa para mi y miré el suelo.

Yo soy mitad Ghoul, Kaneki está muy interesado en los Ghouls...

Yo ahora sabré que es ser un Ghoul... Kaneki sabrá que es tener a alguien Ghoul de amigo.

Yo puedo maravillar a mi querido Kaneki.

Kaneki puede enamorarse de mi.