Cuando te quitas un peso de encima la vida se simplifica. Ese peso puede ser cualquier cosa. Puede ser esos kilos de más que nos sobran. O puede que sea un trabajo. Pero también puede ser una personas y es muy difícil "deshacerse" de alguien, muchísimo. Porque tenemos miedo, pánico, a estar solos, pero a veces solos estamos mejor. Hay que perder el miedo a la soledad, para aprender el valor de la compañía. Y de esa forma, estar con alguien sea una decisión, no una necesidad.
Pero hay veces que ese peso que nos lastraba deja un hueco demasiado grande. Por eso, cuando nos deshacemos de él no solo nos sentimos ligeros. También vacíos.