-¿Cuánto tiempo dice que lleva desaparecido?
-28 horas.
Los oficiales se miraron y luego a mí.
-Discúlpe, joven Russo. Pero no puede reportar una desaparición antes de 48 horas.
-Usted no sabe si en 48 horas mi padre es asesinado. Tenemos tiempo, por favor -supliqué.
-En verdad lamentamos mucho no poder ayudarle. Vuelva cuando ese plazo se haya cumplido.
-Puta seguridad que nos hacen sentir -grité- ¡Gracias!
Mamá se disculpó y salimos de la estación.
-¿Qué te sucede? -dije.
-Eliot, no puedes hablarle así a una autoridad.
-¿Tú crees que eso es una autoridad?, ¡Mi papá está en riesgo y su ''ley de 48 horas'' no nos ayuda!
-Sólo queda esperar, por favor. Tenemos que ser pacientes, esperar para poder pedir ayuda de la manera correcta.
-¿A caso no te interesa?, no sabemos cuánto tiempo tenemos.
-¡Claro que me interesa Eliot!, es tu padre, pero también es mi cónyuge, ¿Crees que no me duele?. Por favor actúa como la persona coherente y razonable que me has demostrado ser toda tu vida y vamos a casa. Tal vez él ya está ahí, o no sé, sólo vamos a casa.
Tiene razón, me estoy saliendo de lugar.
-Perdón, mamá.
Subimos al auto y ella estaba llorando. En toda mi vida jamás había visto a mi mamá derramar una sola lágrima. Nunca creí que una situación como esta podría pasarnos a nosotros. Es decir, siempre pasa en las noticias, en el periódico, diariamente gente desaparece, pero nunca esperas que entre esa gente estés tú o mucho peor un familiar.
Llegamos a casa, el cielo estaba sumamente nublado, perfecto clima para dicha ocasión. Mamá bajó en silencio de el auto y se mantuvo al igual durante toda la tarde. Ninguno de los dos tuvo la fuerza para entrar a el despacho de papá. El dolor que sentíamos nos hacía estar lejos de ahí. Como si cada que pasáramos por esa puerta, un llano sentimiento de abandono y soledad nos abrazara y luego tirara muy fuerte contra el piso.
Traté de distraerme viendo películas, saliendo a caminar, todo lo que fuera necesario para sacar ese sentimiento de mí. Finalmente opté por salir a por un café.
Cuando volví, mamá estaba sentada con la mirada perdida. Sostenía una nota roja. Al escucharme llegar lentamente me miró mientras sus ojos se cristalizaban. Apenas consiguió voz para nombrarme, soltó el llanto.
-¿Qué es eso?, ¿Qué ocurre?
La nota hablaba sobre papá. Sobre que tenía que ser sumamente silencioso en su búsqueda. No podía ir con la policía, detectives o cualquier herramienta de indiscreción que pudiera poner en peligro el anonimato de quien escribía la carta. Daba claras instrucciones de a dónde ir, vaya que el camino es largo. Si lo pensaba con claridad, podría ir con las autoridades y hacer lo correcto. Pero era demasiado arriesgado. En la nota describía que nos seguía. Sabe todos nuestros movimientos y salidas. En cualquier movimiento sospechoso amenaza con asesinarlo.
-Tú sabes bien que no voy a ir con la Policía -susurré.
-¿Entonces qué pretendes hacer?, ¿Ir a buscarlo como en las películas?
-Sí.
-Es que en serio estás demente. Y encima egoísta.
-¿Por qué demonios soy egoísta?, Si pensara sólo en mí, no estaría preocupado, me importaría un comino si mi papá aparece o no.
![](https://img.wattpad.com/cover/64730373-288-k433647.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Descúbreme
General FictionEl desorden mental en muchas ocasiones es incontrolable. La obsesión anexada a una enfermedad mental siempre resulta atrozmente fatal. La necesidad de un psicópata por obtener atención de la persona que quieren, a veces les hace cometer acciones let...