Capítulo VIII: Bienvenidos a la ciudad

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Llevamos ya tres días caminando, no ha escaseado la comida y Edgar fue aprendiendo como usar su K'rik cazando a varios demonios mientras transcurre nuestro camino, al parecer Camila sigue negando sus sentimientos hacia mí y al mismo tiempo admitiéndolo sin darse cuenta, lo necesario en estos momentos es un kit de primeros auxilios y con qué esterilizar las heridas de Edgar causadas por las ardillas doradas, estamos sentados en un hermoso manantial que encontramos caminando, Edgar estaba haciéndola de clavadista lanzándose de una gran roca, no sé porque traería su traje de baño consigo...pero bueno, Camila está recogiendo fresas de un arbusto parece incomoda por la conducta de Edgar, esos dos no encajan en el mismo universo y aunque Edgar intenta ligar con Cami, lo único que ha recibido son bofetadas.

-EDGAR!- volteó a verme y calló en el agua de una forma que hasta a mi me dolió, Cami se reía sin parar al igual que yo, él se precipitó a salir del manantial.

-Ya verás maldito- dijo furioso, tenía la marca rojiza de la estampada en el agua que se dio, parecía furioso conmigo, no paraba de reír hasta que estaba a 3 metros de mi con un K'rik en la mano, paré de reír y desenfundé mi espada templaria, creo que quería golpearme con él, hacía movimientos agiles hasta que Camila se montó en su espalda, el se desconcentró y a punto de caer cuando accidentalmente me golpe con el K'rik y caí al manantial. Abrí los ojos bajo el agua y vi algo que me perturbó, el fondo del manantial estaba repleto de esqueletos de humanos, peces y animales, de repente saltaron de debajo de los esqueletos una especie de peces esqueléticos azules, creo que tenían una especie de alas, nadé hasta la superficie y después al césped, Edgar estaba sentado en el suelo ya vestido con una bofetada pintada en la cara, se veía doloroso, corrí hacia atrás preparado para los peces.

-Oye Nathan, perdón yo...- los peces salieron disparados hacia el cielo y venían en picada hacia nosotros-PERO QUE MIER...

-CALLATE Y AYUDA!- todos los peces pasaron a ambos lados de mi produciéndome varios cortes goteantes de sangre y alcanzar a dar un espadazo a 5 de ellos, si mal no recuerdo eran 15 peces en total, Camila gritó mi nombre preocupada mientras que lanzaba dagas a los peces y Edgar intentaba acertar a alguno, creo que ha acertado a alguno, me sostengo en pié pues el dolor es soportable, corro hacia Camila donde se están acumulando , doy varios espadazos y creo que se ha acabado. Me arrodillo, el dolor se había vuelto más punzante, Camila se arrodilló a mi lado para comprobar que no se había infectado.

Volteó a ver a dirección donde estaba Edgar- ESTO ES TU CUPLA IDIOTA, SI NO HUBIERAS ECHO ESAS ESTUPIDECES ESTO NO HUBIESE PASADO-

-MI CULPA, TU FUISTE LA QUE ME DESCONCENTRÓ Y POR ESO GOLPEÉ A NATHAN!!!-

-PODRÍAN CALLARSE DE UNA MALDITA VEZ!!!- mis palabras quedaron en el aire junto con un gruñido que di después por el dolor, Edgar se acercó y me ayudó a caminar lentamente mientras cargaba mi mochila y la sulla.

Tardamos un poco pero logramos encontrar un lugar donde estar más tranquilos, una ciudad, no estaba en su mejor estado pero era algo, había edificios derrumbados y ladrillos por todas partes, en medio de una avenida había una especie de mercado, Edgar iba cargándome en su espalda pues yo empezaba a flaquear por la constante pérdida de sangre.

-Necesitamos un kit de primeros auxilios, conseguiré uno en este lugar- dice Camila en tono preocupado, al parecer estoy comenzando a verme pálido. Ella se va entre la gente, Edgar me baja en el suelo y me ayuda a recargarme en una pared, saca de su mochila una botella de agua y me dice que tome bastante, lo obedezco y se sienta a un lado mío.

-Lamento todo lo que paso, debí de haber...

-Odio cuando haces eso, jamás pides perdón, te vale una mierda lo que la gente opina de ti y sólo cuando hieres a alguien te importa. Deberías mejorar tu relación con Camila.

-Lo intentaré, pero no tanto como para que se fije en mis encantos, porque ella te pertenece cierto?- le doy un puñetazo en el hombro para que deje de hablar y ambos reímos.

-OIGAN USTEDES!- volteo a donde viene esa voz, es Camila que lleva consigo un kiy de últimos auxilios como el de mi madre, tiene una cruz de madera con un halo amarillo sobre la misma. También trae vendas y alcohol.

Después de un rato tengo brazos, y parte de la pierna completamente llenas de vendajes.- Parece que te hubieses peleado con un tipo musculoso con cuchillas.

-Disculpen. Una voz gruesa habló a un lado de nosotros, era un chico alto, cabello rubio y ojos verdes, trae consigo una bolsa de gimnasio, esta vestido con una chaqueta negra con capucha gris, jeans azul obscuro, deportivas negras y tiene una venda en la mejilla.- Ustedes son los idiotas que mandó el anciano papa Damián?- Es dispositivo comienza a vibrar, ha detectado un hechicero, es este chico, Jayden: el hechicero con la habilidad de la fuerza bruta.

PRIMER HECHICERO, lo convencerán o tendrán que luchar :0, perdón por actualizar tan tarde no tuve tiempo para escribir hoy así que perdonar 3x, aparte si no lo notaste este capítulo es un poquito más largo, VOTEN ,COMPARTAN y comenten :D, ME VOY BYE :3

Perdido y desoladoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora