26.

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-¿Dyson?

- ¿Hmm?- Estaba tumbado sobre su cama con las brazos sobre la cara.

- Aunque me ha encantado besarte...

- ¡Oh no! ¿Me vas a dejar? ¡No por favor!¡No me dejes! Cambiaré.- Comenzó a dramatizar tras incorporarse. Parecía que ya estaba mejor.

- Qué tonto que eres, de verdad. Creo que será mejor que nos vallamos, tenemos algo que hacer, recuerdas.- Todavía no me podía creer todo lo que acababa de pasar, ¡acababa de besar a Dyson Schweinstein!

- Está bien.- Dijo levantándose de su cama e interrumpiendo mis pensamientos.- ¿Me acompaña señorita?- Me tendió la mano, se inclinó y me ayudó a levantarme, a continuación salimos juntos de la habitación y nos dirigimos a la biblioteca.

Era sábado, día libre; por lo que nada nos impidió correr por los pasillos de la academia cogidos de la mano. Habíamos decidido averiguar de una vez qué estaba pasando aquí de una vez.

- ¡Espera!- Susurró tras detenerme al estirar su brazo ante mí.- ¡Tenemos compañía, mira!

- ¿Qué? ¡No puede ser! ¿Qué hace ella aquí?- Dije en un susurro.

- ¿Quién es?

- Es la directora Wasilewsky, la directora de mi academia.

- ¿Y qué hace aquí?

- Se lo mismo que tú, Dyson. ¡Mira  acaban de entrar, acerquémonos!

- Despacio.

La puerta de la biblioteca estaba entre abierta, nos acercamos todo lo que pudimos para escuchar lo que decían, pero no oímos nada.

- Entremos.

- Espera Cat, no sabes que puedan estar haciendo.

- Me da igual, quiero saber qué hace esa aquí esos dos traman algo. O ¿crees qué esto sea sólo una coincidencia?

- No, sobre todo si está con Streinhard, sólo ten cuidado. ¡Vamos!

Al entrar en la sala, no encontramos a nadie por ningún lado.

- ¿Recuerdas el libro?- Asentí y subimos las escaleras rápidamente, mirando cautelosamente cada pasillo hasta llegar al último. Pero al llegar, encontramos el pasadizo abierto.

- ¡Entra!- Corrimos al interior antes de que la puerta comenzará a cerrarse y con cuidado fuimos avanzando. Dyson se colocó delante de mí para guiarme. Íbamos muy despacio, para que no nos descubrieran, sin acercarnos demasiado, solo lo suficiente como para escuchar lo que decían.

- He tenido que aguantar mucho hasta que llegará este momento.

- Y es la hora de que termine la espera, Albert. Hoy es el fin de toda la humanidad, juntos, los vampiros y los licántropos seremos los que dominen el mundo y ya no tendremos que escondernos más. Y lo único que necesitamos es esta llave y a la chica.

Entre Lobos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora