Y aquí estoy , intentando reiniciar mi vida, después de un mala separación y dos hijas , ¿Qué tan difícil será volver a mi vida? , antes de casarme nunca fui una chica de esas que llaman la atención, ahora con 30 años no sé cómo regresar aún empl...
Después de ese maldito beso no he podido sacarme a Ian de la cabeza, pero tenía que concentrarme no sólo en el trabajo, tengo unas hijas que cuidar la semana me ha sido agotadora , por suerte mañana no tengo que trabajar así que me concentro en dejar todo listo, voy a una junta al medio día y ahí está él hombre que no he podido sacar de la cabeza, realmente no estoy poniendo atención, cuando me doy cuenta ya ha pasado una hora y la junta a terminado .
Regresó a mi oficina rápidamente de hecho fui la primera en retirarme de la sala de juntas , no quería estar cerca de Ian , al entrar sobre mi escritorio encuentro un arreglo de rosas rojas que puedo decir siempre me han encantado aunque sean tan comunes, pero hace cubo que nadie tiene un detalle así conmigo, mi primer pensamiento es Ian , pero me río de mí misma sé que él no haría algo así , ¿Quién las habrá mandado? , hay un pequeño sobre con mi nombre , lo abro y realmente lo que dice me hace sentirme indefensa , el miedo vuelve .
Vale, amor : Lamento lo que pasó te amo, volveremos a estar Juntos muy pronto . Atte: El amor de tu vida
Tengo la nota en mi mano, sin pensarlo aviento el arreglo de flores al piso y caigo de rodillas frente a él no puedo evitar derramar lágrimas y recordar , todo lo que él me hizo siento otra vez ese nudo en el estómago el terror que me daba estar junto a él, tengo miedo , no lo quiero cerca de mí o de mis hijas , no podría soportar otra vez esos golpes, esas palabras hirientes, es como si en mi cabeza revivirá todo lo que pase , era recordar cómo iba muriendo poco a poco junto a él .
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No sé en qué momento alguien había entrado a mi oficina y me tomo entre sus brazos yo solo no podía parar de llorar, me sentía aquella mujer indefensa otra vez, podía sentir mi cuerpo temblar .
—Hey calma, calma cariño —me observaba Ian mientras me sostenía entre sus brazos
—Tengo miedo —sale de mis labios y no puedo dejar de llorar , me aferro más a sus brazos
—Nada te va a pasar estas conmigo y no voy a permitir que te suceda nada—
Sentía como acariciaba mi mejilla , con ambas manos tomó mi rostro y lo levanto mi nuestros ojos quedaron a la misma altura , puedo ver angustia reflejada en los suyos , sus labios se mueven pero no entiendo nada de lo que me dice ,baja sus manos para tocar las mías ,no soy capaz de decir nada más, me siento sumergida en los recuerdos del pasado .
—Estas sangrando —solo escucho su voz como un susurro
No lo había notado ¿En qué momento me había cortado? , el me sentó ahí en el piso , salió de la oficina regresando con un botiquín y empezó a limpiar la herida, algo dijo pero seguía perdida es como si todo el mundo se hubiera detenido, no entendía nada de lo que me decía y en un instante momento todo se volvió negro.
Abro los ojos, parece que la cabeza me va estallar , me siento cansada, observó de apoco todo se ve un poco borroso ¿Donde estarán mis lentes? , lo poco que puedo ver estoy en un lugar muy blanco , no veo más que un pequeño mueble a mi lado , estoy cubierta con una sábana blanca mis brazos a cada lado puedo ver uno de ellos vendado , lo muevo y causa un poco de dolor .
La puerta se abre, aparece Ian su rostro se nota preocupado , esta muy serio al ver que me encuentro despierta parece relajarse y una leve sonrisa se dibuja en su rostro se acerca y acaricia mi mejilla.
—Que susto me haz dado—su mano me acaricia lentamente por el rostro
—¿Que hago aquí Ian ?—
—Tuviste una crisis nerviosa y con la herida de la mano , te tuve que traer —
—No era necesario que se quedara señor—no quería sonar grosera pero ya era demasiado vergonzoso haberme visto de esa manera
—No me vengas con eso de señor Valentina , ya ha pasado mucho entre nosotros como para que me trates de usted y estoy solo por qué quería estar seguro de que estás bien, me preocupo por ti—en sus ojos se reflejaba que estaba siendo sincero
—gracias — es lo único que pude decir había sido mucho por un día
—No te voy a preguntar ahora , por qué te haz puesto así , pero sabes que en algún momento me tendrás que decir que pasa.—
Y sabía que a como era Ian en algún momento iba a averiguar qué sucedía , pero solo en este momento necesitaba regresar a casa y abrazar a mis hijas , no iba a dejar que les pasara nada, no permitiría que ese hombre aunque fuera su padre las hiciera pasar por sus golpes ese hombre estaba enfermo y nunca permitirá que se acercara a nosotras.
