One Shots Descendientes

Not my type (Jaudrey)

-Me agrada Audrey, pero no es mi tipo

-Vamos, Ben no era mi tipo y míranos ahora

Jay y Mal se encontraban en la habitación del primero, la pelimorada quería convencerlo de tener una cita con Audrey.

-En serio, ella es genial. Pero es muy... ya sabes, "delicada"- el moreno se negaba rotundamente a la posibilidad de tener algo con la princesa. Mal intentaba persuadirlo diciéndole que al llegar a Auradon le había coqueteado, pero no tuvo éxito ya que Jay hacía lo mismo con cualquier chica que se le pusiera enfrente.

- Hagamos un trato. Ve hoy al parque para su cita, y si ella no te gusta, no te volveré a molestar nunca más.

Luego de que el moreno aceptara de mala gana, se dirigieron al lugar donde se encontrarían con la dichosa chica.

En el parque estaba pasando algo similar, Jane y Audrey charlaban sentadas en una de las mesas que se encontraban allí, y esta última parecía especialmente disgustada.

-Jane, por milésima vez, Jay es muy lindo ¡pero no es mi tipo! Él no es para nada parecido a un príncipe, no es correcto, elegante, ni mucho menos tan educado como ellos.

- ¿Y eso que importa? Es un chico muy dulce, y te vendría bien un cambio. ¡Los estereotipos están para romperse!

La hija de Aurora iba a protestar cuando vio que el ex ladrón y su amiga venían hacia ellas.

-Ahora no tienes como escaparte- bromeó Jane.

- ¡Hola chicas!- habló Mal mientras se sentaba al otro lado de su mesa y arrastraba al moreno con ella.

- Hola Mal, Jay- dijo Jane.

Los otros dos chicos permanecían en silencio, y eso se hacía cada vez más incómodo.

-Si...bueno. Jane, necesito que me ayudes a – la pelimorada se tomó unos segundos para pensar en una excusa razonable- perfeccionar algunos hechizos ¿vienes?

La ojiazul asintió y las dos juntas se fueron hacia las habitaciones.

Luego de unos minutos sin decir nada, fue Audrey la que decidió romper con el silencio.

-Así que... buen juego el de ayer, destrozaron al otro equipo.

-¿A ti te gusta el Turney? Pensé que solo eras porrista para ser popular- dijo Jay sorprendido

-Me encanta, es mi deporte favorito. Y como aún no hay un equipo femenino... me limito a alentar desde afuera

- Creo que sería genial formar un equipo de chicas. Me encantaría ayudarte a convencer al entrenador.

- ¿En serio?- preguntó Audrey, atónita.

Jay asintió sonriente, y en ese momento ambos bajaron la vista para darse cuenta de que tenían sus manos entrelazadas sobre la mesa.

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Hola! Sé que demoré, pero mejor tarde que nunca.

Espero que lo disfruten, y si quieren sugerir algo solo háganlo.

Hasta pronto!