Al día siguiente llegué un poco tarde a clase, entré corriendo y me resbale con el agua que había en el suelo, me púse roja al ver que todos me viéron y miré mi rodilla, suspiré al ver que estaba sangrando.
Cuidado -rió Cameron, me cogió del brazo, me levantó y miró mi rodilla-
Suspiré mirando mi rodilla y le miré a el.
Me cogió en brazos riendo y me llevo a curarme, me sentó en una camilla.
Ay Alejandra... -dijo riendo mientras curaba mi herida- tienes que tener más cuidado
Ya... -susurré mientras miraba como curaba mi rodilla-
Ya está -sonrió y acarició mis muslos-
Me sonroje un poco y asentí
Pasa algo? -rió-
Cameron apretó sus manos en mis muslos mientras sonreía, yo respiraba algo rapido por los nervios, subió sus manos a mi cintura, apretandola, cerré los ojos soltando un suspiro, Cameron sonrió al escuchar mi suspiro y se acercó a mis labios, note su respiración cerca, así que abrí los ojos, me sonroje al verlo a centímetros de mis labios y los chupe nerviosa, me acerqué un poco a sus labios deseando que me besara, Cameron se separó riendo.
Tan rápido cielo? -sonrio pícaro y negó mientras reía-
Me puse roja y baje de la camilla algo enfadada, suspiré.
Eres un cabrón -dije saliendo-
Para - me cogió de la mano y me acerco a él- perdón
He hecho el ridículo... -suspiré y solté su mano, corrí hacia los vestuarios-