Los tr3s 'amigos'

Te invoco

Minhyun se quedó toda una semana en casa de los Choi, para ser eso posible la señorita de la casa hablo con la señora Hwang diciéndole que su hijo y el de ella irían de vacaciones dos semana a una isla no muy lejos, la señora aceptó luego de hablar con su hijo por teléfono, y Minhyun se salvó de ser regañado por su madre, quien ese mismo día envió una maleta con las ropas de su hijo a la casa de los Choi.

Minhyun y Minki no fueron al instituto en toda esas dos semanas, JR y Aron los visitaban casi todos los días, Baekho desapareció tres días seguidos pero volvió y nadie noto nada, ya que tenía moretones no visibles a simple vista. El viernes sería el último día de descanso para Minhyun y Minki así que decidieron salir a divertirse. Los malheridos ya no tenían marcas, Minki se veía bien y Minhyun más que bien, su moretón había casi desaparecido y su labio sanó muy rápido, estaba listo para volver a su casa, pero no sin antes divertirse como nunca ese último día.

Y vaya que fue un día inolvidable.

Al día siguiente, sábado por la mañana. En la habitación del joven Hwang, dos chicos dormían abrazos. Minhyun llevaba puesto sólo sus boxes y una remera grande, como siempre duerme, estaba casi sobre Aron, quien comenzaba a despertar, el moreno no lleva su camisa y al ver a Min de esa forma dormido abrazo a él, casi le da un infarto. Abre grade los ojos mientras mira al chico sobre él, que despierta y le sonríe de forma tierna.

—Buenos días —susurra estirándose y dándole un beso en los labios al estático moreno—¿ Qué pasa? —de un rápido movimiento Aron aparta a Min de él y cae de la cama— ¿Estas bien?

—Mi cabeza —se queja el mayor, acariciando la zona golpeada—. Sí, estoy bien pero ¿Dónde estoy? ¿Y qué paso ayer? —pregunta entrando en pánico.

No recuerda nada y es normal, ayer en la noche habían ido a una fiesta y el moreno había tomado mucho, lo suficiente como para no recordar que paso ahí en la noche, pero Minhyun si recuerda, ya que él no puede tomar alcohol.

—Estas en mi casa ¿No lo recuerdas? —Min finge inocencia—, eres malo Aron.

—Yo, yo, no ¿Mi camisa? Y tú así y yo, no puede ser —tartamudea Aron, sentándose en la cama.

—Eres malo —Minhyun, abraza al mayor por la espalda y acariciando con las manos su pecho— ¿No recuerdas lo de anoche? Los dos aquí, muy juntitos —le dice al oído, sonríe al sentir como se estremece entre sus brazos.

—No, no, esto no, imposible. Min déjate de bromas.

—No es broma, tú me dijiste 'me gustas, Minhyun' luego de eso me besaste y me tocaste...

—¡Basta! —grita apartándose de Minhyun, se pone de pie y su rostro queda rojo—. Tengo que irme —con rapidez busca su camisa en el suelo.

—No, quédate a desayunar, mi madre querrá conocer al novio de su hijo —camina hacia Aron, quien acaba de ponerse la camisa.

—¿Novio?

—Sí, lo que sucedió ayer no puedo tomármelo a la ligera así que ahora eres mi novio —sentencia el castaño, acariciando la mejilla del moreno que se estremece.

—¿Novio? —susurra y el otro asiente con la cabeza—. Debo irme ¡Adiós! —abre la puerta y corre a la salida preguntándose dónde está su zapatilla.

Minhyun se acuesta en su cama y comienza a reír, agarra su celular y marca el número de su amigo.

Mientras tanto en otra casa lujosa se encuentran dos chicos durmiendo abrazados. El rubio de cabellos largos despierta e intenta despertar a su novio, éste se remueve y le da la espalda. El rubio rueda los ojos y se pone de pie, entra al baño y al volver su chico aún está dormido, corre y salta encima de él, sentándose sobre su cadera.