Vicisitudes de solangelo

Parte 3:"Si los objetos hablaran"

Si los objetos hablaran probablemente contarían historias, historias perdidas en el tiempo.

Tal vez hablarían de cosas como la llegada de un hijo de Hades a un campamento de semidioses griegos o tal vez las flechas con las que estaba practicando su puntería cierto hijo de Apolo hubieran contado como la mirada de su dueño se dirigió a la silueta del recién llegado campista con interés para luego continuar con su entrenamiento con el arco.

"Luz y oscuridad se encontraron"  hubieran dicho las flechas o quizás solo hablarían para quejarse de lo malo que era con el arco ese niño rubio hijo del sol.

Y si a quejarse nos referimos posiblemente también se quejarían las mantas y almohada del rubio, ¡Como se movía el mocoso! , sobretodo aquel día en que el nuevo campista había desaparecido, a lo mejor los demás objetos le replicarían que es normal el insomnio de sus dueños, siendo estos semidioses después de todo, pero la manta de Will diría que eso no justificaba el porqué ese tonto la había arrugado con desespero (como si estuviese molesto de no haber podido hablar con el pelinegro desaparecido) ...a lo mejor su compañera murmuraría algo sobre una extraña humedad inexplicable que surgió del rostro de Will y de la que Will no se había percatado.

Eran cosas que ellos no comprenderían y probablemente su dueño tampoco.

Como aquellas vendas que no comprendieron la rara mirada de alivio que cargaba el chico de Apolo al mirar un punto en el horizonte ¡ Era una guerra ! Ese rubio debía estar utilizándolas para curar a los heridos y dejar esas ocasionales miraditas de alivio y admiración para más tarde, pero tenía curiosidad ¿ Qué tanto miraba? Le preguntó al collar de cuentas que colgaba en el cuello del chico, parecía saber lo que ocurría . 

" Solo esta observando al pequeño de armadura negra, Nico ...mmm al parecer es hijo de Hades" 

" Jajaja Luz y oscuridad se vuelven a encontrar sin embargo esta vez la oscuridad se ha vuelto inalcanzable ¿ Qué harás pequeña luz? " 

Las vendas estaban seguras de que no comprendían nada y también estaban seguras que ese collar estaba loco.

El que si creía estarse volviendo loco era el fuego que consumía a semidioses caídos en batalla. Llanto por acá, lloriqueo por allá. Él solo quería hacer su trabajo tranquilamente sin tener que soportar sus quejas ¡lo tenían harto! . Estaba tan cansado de sus lamentos que incluso empezaba a delirar cosas ¿Niños saliendo de las sombras? No, eso no era normal. Supo que tal vez no era un simple delirio cuando el niño sombra se acerco a un rubio de ojos azules que parecía querer lloriquear, para decirle " Michael esta en los elíseos" y sin más se fue. Probablemente aún no estuviera delirando ¡Pero le faltaría poco si continuaban así de llorones y escandalosos! Por suerte el de ojos azules se encontraba más calmado y ya no apunto de derrumbarse.¡Buen trabajo! Ese chico sombra le evitaba el fastidio de escuchar más llantos.

"Aun sin saberlo la oscuridad reconfortaba a la luz"

Muchos objetos esperaban ser útiles y productivos, sobretodo aquellos que fueron creados para ayudar. Los relojes se sentían tan especiales cuando alguien necesitaba saber la hora, los despertadores parecían realizados y satisfechos cuando despertaban a las pobres personas y los libros querían informar y poder ser de ayuda para sus dueños con su contenido ; un claro ejemplo de ello era ese pequeño libro de título : "Mitomagia: Todo lo que necesitas saber" . Okey, puede que fuera pequeño y no precisamente educativo, pero sabía que fuera de la librería alguien lo necesitaba, por eso prestaba atención a sus posibles compradores: Esa chica universitaria o el hombre de lentes o la pequeña de cabello castaño...¡Bah! Ninguno de ellos se encontraba interesado en él. Cuando llego a la librería el chico con pintas de surfista y empezó a mirarlo, se emocionó,emoción que fue desapareciendo poco a poco al pasar media hora con el indeciso surfista ese debatiéndose entre si llevarlo o no. ¡Su dueño era muy indeciso! Sí, dijo dueño porque después de media hora llegó la encargada del lugar a preguntarle al surfista si iba a comprar algo, este último parecía avergonzado de que alguien lo descubriera pero finalmente decidió comprarlo. Fue metido en unas maletas junto a unas cartas de Mitomagia y un montón de ropa y otros objetos como para realizar un viaje. Cuando llego al campamento, después de enterarse de todo el asunto : dioses griegos-hijos-campamento-Apolo-Will, empezó a sentirse inseguro. Era un libro y Will era un semidiós con dislexia ¿Cómo podría serle útil? Sus dudas fueron resueltas cuando junto a sus compañeras las cartas fueron transportados a una enfermería, específicamente lo que aparentaba ser una pequeña oficina. Will leía cada vez que tenía tiempo libre y practicaba con las cartas, ellos se sentían verdaderamente útiles aunque no entendían por qué los ocultaba cuando alguien entraba a la oficina como si su existencia fuera un secreto. Finalmente llegó el día en que acabó de leerlo, aun con sus problemas de dislexia. Ese día Will se notaba un poco emocionado , había agarrado a las cartas y salió de la enfermería...pero regresó luego de unas horas y parecía decepcionado, guardo a las cartas y murmuró un: " Ha vuelto a irse del campamento, otra vez y sin avisar, ese idiota" . Luego sacudió su cabeza y volvió a ser el Will de siempre y volvió a leerlo y practicar con las cartas. Ellos eran útiles pero extrañamente no se sentían satisfechos, como si supieran que debían ayudar a Will en algo más.

"La luz no se rendiría en alcanzar a la oscuridad"

Pocos objetos lograban sentirse satisfechos con lo que hacían. Algunos de ellos como es el caso de ese tablero o mini-pizarra o como quieran llamarlo creían que no lograrían estar satisfechos con su situación. No podían culparlos, tenían sus razones por ejemplo ese pequeño tablero- pizarra . Al pobre tablerito lo habían marginado desde niño, sus hermanos de fábrica se burlaban de él. Y cuando estuvieron en venta en ese centro comercial ¡Fue el único al que no compraron!, incluso lo pusieron en oferta, todo eso causo la baja autoestima del tablerito. Autoestima que no mejoro cuando lo robaron, habían sido unos gemelos que lograron burlar la seguridad del centro comercial como por arte de magia.¡Que sería de él!. Estaba tan desconsolado que no presto atención a nada de su alrededor hasta que fue vendido por sus captores a un chico rubio. El tipo rubio Will era extraño, pero le ayudo a subir su autoestima ya que por alguna razón le miraba como si fuera la solución a sus problemas, le hubiera gustado quedarse con Will pero con su mala suerte pronto estuvo en manos de un sujeto intimidante. Nico era su nombre, le daba miedo, su mirada y aspecto le intimidaban. Extrañamente luego de unas semanas se acostumbró a su nueva vida, no era mala en realidad: Nico (al cual ya no le temía) anotaba en él a dónde iba en su ausencia de la cabaña. Y él ahí colgado en la puerta de esa oscura cabaña les informaba a los amigos de Nico y a Will. Una tarde sumido en una profunda meditación(cosas místicas de objetos) llegó a la conclusión de que estaba satisfecho con lo que hacía, no le guardaba rencor a Will por regalarlo a un tipo oscuro con cara de emo, en esa nueva rutina se sentía útil e importante como cuando sabes que haces algo bien y estas orgulloso de ello. Porque cuando veía la cara de alivio de Will al saber dónde se encontraba Nico o lo mucho que se esforzaba Nico en dejar mensajes antes de salir, estaba seguro de lo satisfecho que estaba con lo que hacía.

" La luz derrite las barrera de la oscuridad y entonces juntas se dan cuenta de algo. La luz brilla más intensamente y la oscuridad se vuelve más poderosa y notoria. Se complementan"

Los objetos que definitivamente tendrían mucho material para contar historias son los de mayor edad: Estatuas, pinturas, libros antiguos. Esta vez nos centraremos en el típico libro antiguo y divino que encuentras en toda biblioteca o en un baúl dentro de una cabaña para semidioses. Sí, ese libro tiene tantas historias que contar. Desde su creación por el dios Apolo, los líos amorosos que ha visto a lo largo de los años, etc ...ser un manual amoroso no era fácil y mas aún si eras considerado mágico o divino al ser un dios tu creador, pero las historias que era capaz de presenciar valían la pena. El libro probablemente contaría como es que todas las historias que ha visto a lo largo de sus años comenzaban con "esa" mirada de interés, igual a la que el tal Will Solace le estaba dando. Definitivamente otra historia esta por comenzar diría él.

 Pero no olvides , eso solo ocurriría si los objetos hablaran.

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Hola, si has llegado hasta aquí : ¡Muchas gracias por leer! Espero sea de tu agrado esta historia.

Aquí termina el prólogo, a partir de ahora comienzan los enriedos de Will gracias a los consejos de Apolo con haikus incluidos. Si tienen ideas, sugerencias o consejos comenten.

Gracias por comentar a : GretaPonce y ClaudiaZavallaPlate, verdaderamente sus comentarios me inspiran. Es como ¡Wow! De pronto me entran muchas ganas de escribir.

Nos vemos.¡Hasta el siguiente capítulo!.