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Narra Sebastián

Cuando esa chica me dijo la dirección de donde estaba Jade, colgué, agarré las llaves de casa, la billetera y las llaves del auto, bajé las escaleras

-Mamá ya vuelvo- le dije mientras me ponía la chaqueta, estaba haciendo un poco de frío

-A donde vas a estás horas?- me preguntó arqueando una ceja

-Se presentó una emergencia, te amo!- le digo y salgo de casa.

Subo al auto y emprendo camino a la casa donde es la fiesta, espero que Jade esté bien, espero que haya dejado de hablar con ese de la foto, ella es mía, mía.

Miro mi celular y son más de las 12, por favor que nada le pase a ella, está borracha y sola.

Unas calles antes ya se escuchaba la música, mis nervios aumentaban aún más. Llego donde es la casa, hay muchas luces y música muy alta, bajo del auto, y entro a ese lugar.

Hay chicos y chicas besándose, chicos y chicos besándose, chicas y chicas besándose, hay muchos bailando y otros sentados a punto de tener sexo, esto es desagradable. Una morena se me acerca y me ofrece marihuana, oh no,claro que no nena, yo me quiero. Si me ofrecieron a mi ya le tuvieron que ofrecer a Jade, ojalá lo haya rechazado.

Estoy en busca de esa rubia, me altero porque no la encuentro, y si está en un baño con un tipo...? No Sebastián, piensa en otra cosa.

Al fondo de la sala, hay un gran sofá. Veo que hay un grupo de chicos, y en uno de ellos una mujer está sentada en sus piernas, y es rubia...

Me acerco para distinguir a esa rubia, se están besando, por favor no, que no sea ella. Terminan de besarse y esta chica toma un trago del vaso que tiene en su mano dándome a distinguir su rostro, el que no me es reconocido, exhalo con tranquilidad, y la sigo buscando.

Veo en la multitud que están bailando, y veo esa cabellera rubia de las fotos, aparto gente del camino para acercarme a ella, sonrío al ver que si es, por fin la encontré, encontré a Jade. Está bailando, espera, un desgraciado esta detrás, restregándole su asqueroso miembro, ella le sigue el juego, pero está borracha, entonces no tendría qué reclamarle.

Camino hacia donde está, es tan hermosa en persona...por qué no la conocí antes, demonios.

Cuando llego la agarro de la muñeca con suavidad haciendo que ella pare de bailar y me mire con el ceño fruncido, dios santo esta chica me va a matar.

-Jade, cariño, tenemos que irnos- le digo y ella frunce el ceño aún más.

-qué? Claro que no, quiero seguir bailando- me dice y suelta mi agarre

-Jade, estás borracha, debemos irnos- le digo nuevamente

Parece enojarse...

-que no, quiero quedarme, es que no escuchas?!- me dice y con sus manos en mi pecho me empuja, lo que hizo que me alejara un poco de ella.

Se ve jodidamente sexy enojada.

Vuelvo donde ella, y le sonrío.

-perdoname por esto.- le digo y ella frunce el ceño.

Al instante la agarro de las piernas y la alzo quedando a mis hombros, haciendo que la cara de ella quede en mi espalda. Pongo mis brazos en sus grandes piernas, no quiero tocarle el trasero, porque aún así la respeto, tal vez en un futuro.

Ella grita y patalea todo lo que puede pero a nadie le importa ya que están muy ocupados intentando tener su momento intimo.

-QUÉ DEMONIOS CREES QUE HACES?!!!! BAJAME DE UNA MALDITA VEZ!- me dice y con sus puños golpea mi espalda, yo solamente río pues esto es un gran comienzo de una historia de amor.

la subo al auto y ella solamente se cruza de brazos sin dirijirme la palabra, en unos minutos se queda dormida.

a donde tengo que ir? la llevo a su casa? no se donde vive y se ve tan tierna durmiendo que no quiero molestarla, es tarde, la llevaré a casa a que descanse.

Continuará...






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Espero les esté gustando !

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