Narra Jade.
Estaba en la cocina y escucho que tocan el timbre varias veces.
Mientras más me acerco más insisten-voy!-digo algo enojada
Abro la puerta y veo a Sebastián pasando sus manos por su cabello varias veces. Cuando abro y me ve entra como si fuera su casa
-claro, pasa- digo en tono burlón cerrando la puerta
Lo veo un poco alterado y esto me asusta. Tiene la respiración agitada, me mira de pies a cabeza y exhala sonriendo.
-pasa algo?- le digo mientras camino hacia la cocina
Él va detrás de mí
-desde cuando te volviste a hablar con Alejandro- me preguntaLo miro con el ceño fruncido y él me levanta las cejas
-hace unos días.- digo y le paso un vaso con agua
Me lo recibe y se lo toma en un segundo
-Sebastián, pasa algo?- vuelvo a preguntar, me está preocupando.-no soporto pensar en que volviste a estar con él- me dice acercándose a mi
-solo somos amigos, yo no entrelazo mis manos con el, como lo haces tú con tu "amiguita"- le digo y me alejo rápidamente
Corre detrás de mí, y agarra mi brazo haciéndome voltear, se acerca demasiado a mi pegando nuestras frentes y me coge de la cintura apegándome a él, sintiendo un poco su miembro.
-odio ver fotos de él contigo- me dice mirando fijamente mis labios
Trato de alejarme pero no me suelta, mi cuerpo pega en la pared, ya no tengo a donde ir. Sé que quiere jugar, y admito que me encanta como estamos ahora, juguemos entonces baby.
-y yo odio a tu amiga, odio que entrelaces tus manos con ella, oye, no deberías estar con esa? Como es que se llama... Ah si, kendall, no es hora de irte? Tal vez te castiguen porque ya es tarde para un niño como tú.-le digo en forma coqueta y burlona acercándome a sus labios pero volviendo a alejarme
Él sonríe y muerde su labio inferior
-sabes que me traes de cabeza?- me dice mirándome a los ojosPongo mis manos alrededor de su cuello y sonríe, estoy completamente nerviosa, siento sus manos en unas de mis piernas y mi piel se eriza al instante, me vuelve a coger de la cintura y mi trasero golpea la mesa, vuelvo a sonreír y me apoyó un poco contra esta. Sebastián vuelve a poner su mano en mi pierna acariciando suavemente, yo la levanto un poco y rodeo con ella el cuerpo de él, pegándolo más a mi, y sintiendo más lo que ahora sería una erección.
-tú me tienes de cabeza- le digo y me mira, tiene una sonrisa de oreja a oreja
Finalmente se acerca a mis labios, nos besamos, por fin llegó este momento, nuestros labios parecen encajar perfectamente, su lengua pide acceso a mi interior el cual le accedo al instante, con mis manos juego con su cabello, enrollándolo en mis dedos, nos separamos por falta de aire y sonreímos.
-no sabes hace cuánto esperaba esto- me dice y sonríe
Sonrío y nos damos otro beso, luego nos separamos nuevamente por falta de aire y me da besos en el cuello, cielos, me encanta, con la mano que tiene en mi pierna, la va subiendo dirección a mi zona íntima, yo le pego en la mano y el ríe
-crees que soy así? Soy todo lo contrario princesa- dice esto mirándome y sonríe
Le doy besos en el cuello, y el da pequeñas risas
-qué pasa? Digo riéndome
El me mira y se ríe me suelta un momento y me muestra sus brazos
Mira cómo me tienes- fije mi vista en ellos y tenía los pelos de punta
Me reí y me volvió a agarrar de la cintura, nuevamente subí mi pierna rodeándolo y nuevamente sentí su dura erección.