Suicida.

Uno.

"Entraste al infierno y no saldrás sin quemaduras"

Esas palabras se repetían en su mente una y otra vez, una y otra vez.

Cuando su hermano y los otros cuatros chicos le dijeron esas palabras no entendió, pero una semana después  las palabras cobraron sentido.

¿Quien diría que los amigos traicionan?
¿Quien diría que los hermanos, traicionan?

Ella creía en ellos, pero ahora sufrirá, ahora ellos le darán su infierno.

Ella caminaba un poco asustada por las pasillos del instituto, rogando que ellos no la vieran, se había llevado un suéter negro y un short negro, así tal vez no la reconocerían.

Cuando iba por los baños una mano la jalo.

— ¿La gorda cuando adelgazara?, grito uno de sus "Amigos" , ella se miro sus piernas y su estómago y sintió odio por sí misma.

— ¿Por qué no te mueres?– grito otro y le tiró una cuchilla— Oh y hazlo vertical horizontal no sirve, le guiñó un ojo y sonrió cínicamente.

—Oh no chicos no la maten todavía, ahí que divertirnos— grito otro chico, y lo últimos lo dijo con perversion.

— ¿Por qué lo hacen?, susurro ella.

— ¿Por qué?— grito irónicamente su hermano — por que no mereces vivir, por que eres alguien que no sirve para nada, eres algo peor que los piojos, ahora veté.

Ella lo miro mal, su súper-héroe, ahora era su villano, nunca ningún hombre le había roto el corazón hasta ahora. Y lo peor era su hermano, salió corriendo de ahí con lágrimas en sus ojos.

¡Odiaba a su hermano! ¡Odiaba sus amigos! ¡Se odiaba a ella misma!.