Tres años, lo espere por tres años, no puedo más. El que te guste un chico es una lata, y más aún si no eres correspondida. He pensado que los chicos apestan, pero he conocido otros que valen la pena, a pesar de que solo uno ha llegado a gustarme, así que no todos apestan, sólo él. Eaden Stock, el chico que me ignoró por 3 largos y patéticos años. A pesar de todo lo que hice, nunca llegué a más que un simple "hola", ni siquiera en friendzone me dejó. NADA. Estoy harta, harta de que me ignore, no me escuche y pretenda que no existo, harta de él.
La secundaria fue algo raro, tantas películas, series y libros elevaron mis expectativas, esperaba más, de mis compañeros, de la escuela, tal vez incluso de los profesores, pero sobre todo, esperaba más de mis amigas, esperaba que no fueran hipócritas, que me hablaran siempre sinceramente, que supieran guardar secretos, que confiaran en mí cómo yo confié en ellas. La única sincera fue Chloe, y ni eso, siento que no confiaba lo suficiente en mí, sin embargo, ella no me dio la espalda, me escuchó y me aconsejo cuando más la necesitaba, y estoy agradecida.
Me llamo Sarah Colman, tengo 16 años, vivo en Burton on the Water, un pequeño pueblo del sur de Inglaterra. En mi familia somos mis padres, mis dos pequeños demonios..., digo hermanos menores y yo.
Para mí la preparatoria será la oportunidad de empezar de nuevo, tener nuevos compañeros, nuevas amistades, nuevos maestros, ¿y porque no? Incluso un nuevo amor...
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Es una pinkie promise
Novela Juvenil¿Una sola promesa puede cambiar su vida? Sarah Colman, una chica de 15 años. Entra recién en la prepa, se encuentra con el chico que le había gustado desde su corta secundaria. Eaden Stock se enamora de ella, y Sarah se vuelve muy especial en su vid...
