Y ahí llegaste tú.

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Pasan ya dos días desde que decidí independizarme y aquí estoy, en mi nueva casa.
Tiene muchas habitaciones y tal vez sea muy grande para mi sola. Lo mejor de todo es la piscina. ¡Es enorme!
Necesito dinero para pagar la casa y pues decido buscar trabajo. Llamo y hago muchas entrevistas y no pasa ni una hora y ya recibo una llamada de trabajo.
Es un trabajo de socorrista en la piscina de la ciudad y me pagan bastante bien. Mañana empiezo para ver si me gusta el trabajo, así que me acuesto pronto porque si nos mañana no me despierto.
9:00 a.m
Suena el despertador.
Tengo tiempo para rebolcarme un poco antes de levantarme.
Me levanto.
Me asomo al balcón que tengo en mi habitación y hace un día perfecto.
Bajo a la cocina y me preparo el desayuno. Corto unas cuántas frutas y las meto en un cuenco. Saco la nutella y pongo casi el bote entero en el cuenco. Me hago un zumo de naranja y salgo a desayunar al jardín.
Me siento en la mesa y empiezo a desayunar y mientras le llamo a Mery.
No responde.
Seguramente estará durmiendo.
Acabo de desayunar y me visto.
Me pongo el bañador rojo de socorrista y encima un vestido semi transparente muy veraniego.
Cojo mis cosas y salgo por la puerta.
-Hola-digo nada más entrar.
-Hola-me dice el recepcionista.
Me explica todas las cosas que tengo que hacer y me siento en la silla del socorrista.
Es una piscina de estas privadas para ricos con pistas de tenis y campos de golf.
A mi lado hay otro socorrista. Muy mono la verdad. Con el pelo castaño y despeinado y una perfecta sonrisa que me derrite.
-¿Eres nueva?-me pregunta.
-Sí ¿Tu?
-Sí.
-Soy Mia.
-Yo Hugo.
Además de guapo tiene un nombre precioso.
-Es aburrido estar aquí-me dice.
-Y que lo digas.
-¿Tienes algo que hacer después de trabajar?-me pregunta.
-No. Si quieres podemos ir a comer y así nos conocemos más.
-Perfecto-me dice con una sonrisa de oreja a oreja-podemos comer en un italiano que hay aquí al lado, ¿que te parece?
-Genial-le contesto.
Cuando acabamos de trabjar me dirijo al italiano.
5 minutos después llega él.
-Lo siento por tardar-me dice con cara de...no se...de disculpa por así decirlo.
-No, tranquilo, sólo llevo 5 minutos aquí.
Se sienta en frente mía.
Va muy guapo, por cierto.
Empezamos a hablar sobre nuestros hobies.
Si os digo la verdad, me atrae un poco, pero sólo un poco.
Cada vez que me habla me pongo roja y no corazón va a mil por hora.
Acabamos de comer y damos una vuelta hasta llegar a mi casa.
-Se que nos conocemos poco, pero me pareces una persona maravillosa Mia-me comenta rojo.
-Digo lo mismo de ti.
Nos reímos los dos.
Ya estamos en la puerta de mi casa y le invito a entrar.
-¿Y tus padres?-me pregunta etrañado.
-Oh no, vivo sola desde hace unos días, por eso necesitaba un trabajo.
Nos sentamos en el sofá y me levanto para traerle un poco de nutella. Sin querer se me cae un poco encima de él.
-O lo siento.
-¿Como que a eso estamos jugando eh?-va a la cocina y coje un paquete de harina.
Vuelve al salón y me lo tira en mi cabeza.
-Noooo-chillo.
Cojo la leche y se la tiro.
Nos empezamos a reír como a locos.
Paramos y subimos a que le enseñe mi habitación.
-Esta es mi habitación.
Se la enseño con la mano.
-Es bonita-me dice.
Nos sentamos en la cama.
-¿Sabes que?-me dice.
-¿Que?
-Mañana verás lo que te pasará en la piscina por haberme tirado la nutella.
Empezamos a pegarnos y a reírnos como niños pequeños y, de alguna manera u otra, acabo encima de él en la cama.
Nuestros cuerpos están pegados uno encima de otro y nuestras caras a milímetros.
Se acerca un poco más y yo hago lo mismo.
Nuestros labios se acaban juntando pero enseguida nos separamos y no pasan ni dos segundos y ya están de nuevo juntos. Esta vez si duramos mucho rato y pasamos al juego de lenguas. Me mete la lengua hasta el fondo y yo hago lo mismo. Separamos nuestros labios por falta de respiración y los volvemos a juntar, pero esta vez empezamos a dar vueltas uno encima de otro por la cama.
Nos damos cuenta de los que estamos haciendo y nos separamos. Nos levantamos corriendo de la cama.
-Emm...yo...me tengo que ir-me dice rojisimo.
-Si, yo me acabo de acordar que tengo que hacer alguna cosas-le digo para disimular.
-Adiós.
-Adiós.

Bua, ha sido todo tan raro y tan rápido. No se ni como lo he podido hacer. Sí, es verdad que lo estaba deseando, ¡pero lo acabo de conocer!
No se, pero creo que me estoy enamorando.

Bueno espero que os gusten estos capítulos que estoy subiendo, ya los estoy intentando hacer más largos.
No se si hoy voy a subir más porque son fallas y yo soy fallera y además hoy os he recompensado bastante de todo este tiempo que no he subido.
Por favor os lo pido, comentar lo que os parece el capítulo y votar que me hace mucha ilusión.
Os quiero.

Raquel🐸

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⏰ Última actualización: Mar 18, 2016 ⏰

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