RELATOS BREVES

RELATO BREVE 4

ADOPTADA POR UN FAMOSO

Nunca pensé que este día llegaría, el día en que saldría de Beacon Hills, el orfanato donde llevo viviendo 6 años y medio. Mis padres me dejaron en este orfanato cuando yo tenía 7 años y medio, no por voluntad, sino por obligación, me prometieron que volverían, pero no lo hicieron, más bien no pudieron, mis padres fallecieron hace 2 años en un accidente de tráfico. Ellos me querían con locura, igual que a mi hermano mayor Edgar, nos venían a visitar una o dos veces al mes, hasta que un día dejaron de hacerlo. Fue el día en que me enteré de que habían fallecido.

Pero bueno, no me gusta hablar de ese tema, hablemos de mi nueva familia, aún no sé de quién se trata, Maddie, la directora del Beacon, me ha dicho que es alguien que yo admiro. Mañana por la mañana será cuando por fin sepa quién será mi nueva familia.

Ahora mismo, son las 20:00, hora de dar la cena a los bebés y acostarlos, la mayoría de los adolescentes están ahora haciendo otras cosas, yo prefiero ayudar a Maddie con los bebés, me encantan, son tan abrazables y monos.

Miré al pequeño Davis descansar en su cuna abrazado a mi mano, adorable, acababa de cantarle una nana y se había quedado dormido en mis brazos.

Ya era la hora de la cena para los grandes, busqué con la mirada a mi hermano, que estaba sentado en la mesa de siempre con Kelsey, mi mejor amiga.

-Hola - saludé alegre.

-Hola Ali, ¿Cómo va con los peques? - Kelsey acostumbraba ayudar con los bebes, pero como está resfriada, no la han dejado entrar.

-Muy bien ¿y tú cómo estás?

-Mejor - se encoje de hombros. Ambas estamos evitando que mañana nos separaremos y ella se quedará sin mí y sin Edgar - Oh pero que digo, no estoy bien, os echaré de menos - dice con los ojos cristalinos.

-Oh no llores pequeña - mi hermano siempre nos ha sobreprotegido, y no soporta vernos mal - Recuerda que vendremos a verte cada semana.

-Ya, pero nunca más será lo mismo - dice secándose las lagrimas.

-Lo sé - dijo estrujándola entre mis delgados brazos - Pero nunca debes olvidar.

-Que somos amigos de verdad - dijimos todos a la vez.

Cenamos algo más animados y riendo, como de costumbre, por estupideces.

(...)

Hoy era el día, ya me había despedido de todos, y estaba en la entrada junto con Edgar y con Kelsey, a la cual habían dejado esperar conmigo.

-Hola Maddison, vengo a recoger a Alisson y a Edgar Miles - El grito ensordecedor de Kelsey rompió mi tímpano en dos.

-E-E-Es... ¡Es Jamie Campbell Bower! - Exclama - ¿Recuerdas? De cazadores de sombras, una de nuestras pelis favoritas - dice saltando y sacudiéndome de un lado a otro. Oí la risa del rubio famoso que nos miraba divertido.

-Tu eres Kelsey McKenna, ¿cierto? - ella siente- Vendremos a verte cada semana no te preocupes - Jamie le guiña un ojo.

-Me parece bien - sonríe como una boba.

-Lo siento, pero nos tenemos que ir, el jet está esperando - ¿Había dicho jet?

-Adiós pequeña - Edgar yo y Kels nos fundimos en un abrazo que hace que los tres lloremos, cuando una voz nos interrumpe.

-¿Kelsey es como una hermana para vosotros no? - Todos asentimos - Pues yo adopté a unos hermanos, si ella es una hermana, vendrá también - Kels abre los ojos como platos y se le corta el aire.

-Sé que no te conozco - me acercó a él - Pero te quiero - digo como una loca histérica y me abalanzo sobre él.

-Me alegro, Kelsey, ves a hacer tu maleta-Entusiasmados, corremos a ayudarla.

(...)

-Alaa - digo al entrar a la enorme casa de Jamie - Me esperaba algo más... no sé, no tan rústico ni hogareño.

-Me gusta sentirme en casa - se encoje de hombros.

-Una casa muy grande - comenta mi hermano - ¿Y las habitaciones?

-Arriba, hay varias, elegid la que queráis, si lo preferís podéis pintar y redecorarlas.

Corrimos y yo entré en una blanca con una pared verde pistacho y con el techo negro, adornado con una lámpara blanca. La cama estaba en la pared de color verde. Un poco más al fondo, en esa misma pared, había un precioso baño adornado con tonos violetas, puede sonar raro, pero era muy bonito. Al final de la habitación había un sofá/arcón que acompañaba un precioso ventanal. Al otro lado de la habitación había un vestidor y un escritorio de lo más amplio. Había otra puerta en la pared del escritorio, la abrí y me encontré con una pequeña sala con un sofá de cuero blanco y un sillón negro de masaje, al lado un portátil Apple y una pantalla enorme. Esta sería mi habitación.

-Alisson, la cena esta lista - dice una mujer rubia de mediana edad - Soy Margareth, la madre de Jamie - sonríe con dulzura.

-Hey, te has quedado con la mejor habitación - Kelsey y mi hermano me atacan con cosquillas por venganza. Definitivamente, sería feliz.

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Hola langostitas:3

Este relato es bastante más largo. Espero que lo difrutéis igual que lo he hecho o a la hora de escribirlo :)